Sobrevivió la noche gracias a cuidados y una estufa. El frío también pone en peligro la vida de los peluditos.
La imagen de un pequeño animalito tiritando de frío, acostado a los pies de un árbol conmocionó a todos en las redes sociales este fin de semana. El hecho ocurrió en Ñemby, en una zona de precarias viviendas, el animalito fue asistido por rescatistas de buen corazón.
El perrito a quien ahora le llaman “Abuelito”, según los lugareños, llegó a la zona días antes y en la noche del sábado no pudo conciliar el sueño, porque las heridas que tenía y el frío intenso solo le hacía llorar.
“A mí me llamó una nena, y me preguntó si yo hago rescate. Le expliqué que no, pero que le dije que si era cerca que me pase todo por WhatsApp, y me avisa que es en Ñemby. Por más último sogue que estaba agarré el auto y me fui y llegué al lugar”, he’i a Crónica Adriana Moreira, quien le salvó la vida a “Abuelito”.
“Él estaba muy frío, apenas movió la punta de las orejas y abrió los ojos. Estaba helado, como esas barras de hielo para tereré. Y tenía un olor fuerte, sus genitales estaban agusanados, ya casi todo el tejido ahí estaba carcomido. Todo su aparato genital está complicado. Le tapamos con una frazadita, cuando le alcé te juro que su cuerpo crepitó, parecía que se iba a partir de lo congelado que estaba”, comentó Moreira.
Una vez a salvo, le llevaron a una veterinaria sobre Acceso sur, ahí fue atendido para contrarrestar la hipotermia. “Le pusieron dos bolsas y botellas de agua caliente, le taparon con mantas. Una persona de buen corazón donó una estufa y con eso pasó la noche. Se le limpiaron las heridas, se le puso suero. Pero él desde que fue atendido nunca más abrió los ojos.” contó, el perrito quedó dormido, como en un estado de coma.
Tiene que hacerse varios estudios he’i
Pasó la noche muy delicadamente. “Nunca dejó de temblar, saltaba su cuerpito sobre la camita”, dijo. Ahora está superdébil, no se levanta y hoy recién abrió los ojos, ahora se tiene que hacer una serie de estudios.
“Si él amanece mañana, se tiene que hacer todos los estudios para ver si no hay daños internos. La moraleja de esto es que no hagamos más la vista gorda, hay que dejar de ser indiferentes y no andar más con el famoso ñembotavy, de no, si no es mi perro, no me corresponde”, explicó Adri Moreira.
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