Miguel Cárdenas, golero paraguayo, sigue dándole al fútbol a sus 41 años. Vive en Rosario y allí montó un supermercado. Sinónimo de sacrificio.
- POR JORGE IZQUIERDO
Dejar tu ciudad natal, adecuarte a las reglas en otra comunidad, a las culturas ajenas y, por sobre todo, a tener que alejarte de tus familiares, no siempre resulta ser una tarea fácil. Eso es algo que sintió muy profundamente Miguel Cárdenas, oriundo de la ciudad de Altos.
Fue un gran arquero paraguayo a finales de la década de los 90 y gran parte del nuevo milenio, defendiendo los colores de Sol de América y Nacional. Incluso estuvo a punto de pasar a filas de Olimpia, pero por cosas de la vida no se le pudo dar.
Cárdenas jugó por última vez en Paraguay con la camiseta de la Academia, allá por el 2006, para luego partir a suelo argentino y hacer carrera en diferentes clubes del ascenso.
“No me puedo quejar de mi suerte. Jugué por muchos años de manera profesional y hoy, con 41 años, lo sigo haciendo en un equipo del interior, acá en Rosario (Argentina)”, arrancó diciendo a Crónica.
“Estoy hace 13 años acá y ya me adapté completamente, estoy con mi familia. Tengo un supermercado acá en Rosario y nos va bien. Procuramos cada día de salir adelante”, agregó el golero, que hasta ahora tiene la particularidad de chutar tiros libres y penales.
Pero para Miguel no fue tan sencillo quedarse a vivir por ashá. “Apenas tengo tiempo, nos vamos con la familia a Altos, ahí están mi gente, mis amigos y eso es algo que uno extraña mucho siempre”, remató.
“CON LO QUE GANÉ EN EL FÚTBOL, PUDE COMPRARLES UN TERRENO Y MONTARLES UNA CASITA A MIS PADRES EN ALTOS. TODO LO QUE SOY SE LOS DEBO A ELLOS”
“CUANDO ERA JOVENCITO ME LEVANTABA A LAS 4 DE LA MAÑANA PARA IR A TRABAJAR DE ALBAÑIL, CAMINABA DESDE ALTOS HASTA SAN BERNARDINO Y LUEGO ENTRENABA A LAS 5”
Miguel Cárdenas, Jugador paraguayo
Villar habló por él, pero su club otrancapaite
Miguel jugó en Tiro Federal, Alvear y Estudiantes de Río Cuarto, todos del ascenso argentino. Jugando por Tiro, fue muy destacado y cuando eso, Justo Villar atajaba para Newell’s Old Boys, de Rosario. ¿Qué pasó? Villar iba a ser transferido y habló con los directivos de la “Lepra” y recomendó la contratación de Cárdenas.
Se reunieron y pasó lo siguiente: “El presidente de Tiro era un usurero y Newell’s le debía plata. No me quiso largar por esa razón, quería mucho dinero y trancó mi ida a Newell’s”, lamentó Miguel.
Éver Almeida fue el DT que más lo ayudó en su carrera
Miguel se inició como pelotero en el club 25 de Noviembre de Altos y luego jugó el Interligas con la selección alteña en la categoría Sub 19. Atendé quien fue el DT de esa selección: nada menos que Éver Hugo Almeida.
“Almeida fue el que me dirigió en Altos, él me trajo después acá en Sol, me ayudó mucho y le estoy agradecido. Yo jugaba de volante en mi club, pero después faltaba arquero y yo me quedaba. Desde ahí que me manejo en el arco nomás ya”, sintetizó.
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