Las personas que estuvieron en la cima del mundo y luego tienen una caída estrepitosa casi siempre se refugian en Dios y en todo lo que rodea a lo espiritual.
Este es el caso del ex futbolista colombiano John Viáfara, quien en el 2004 tocó el cielo con las manos al ganar la Copa Libertadores de América con Once Caldas de su país (fue compañero de Jonatan Fabbro) y actualmente está procesado por narcotráfico, muy cerca de ser extraditado a EE. UU.
En los últimos días la Corte Suprema de Justicia aprobó su extradición a Estados Unidos, solamente hace falta que esta sea firmada por el presidente de la República, Iván Duque.
El ex ídolo del fútbol cafetero habló con el diario La Patria y entre otras cosas dijo que se arrepiente de no haber puesto a Dios por delante de todo y de todos y que se dio cuenta de su error en este momento difícil que está pasando.
“Pienso en que Dios sabe cómo hace sus cosas y que así como en un momento de mi vida fui un campesino recolector de fruta, pasando a ser uno de los jugadores más grandes de Sudamérica, representando a mi país, ahora soy un colombiano más, preso de su libertad y por la realidad de nuestro país. De lo único que me arrepiento es no haber puesto a Dios por delante de mis planes y mis proyectos”, señaló el exdelantero.
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