“No sostenía al bebé en ese momento (…) Habrá sido el espíritu de una criatura que está ahí”, dijo el radiólogo.

En un relato increíble, el licenciado en Radiología, Carlos Silvero -quien trabaja en el Hospital de Clínicas de San Lorenzo-, se permitió emocionarse al revelar un suceso que considera paranormal, que le tocó vivir y que sorprendió a todos.

Una niña que se encontraba internada en el hospital debía ser sometida a una radiografía de control. El radiólogo Silvero se encargó del estudio. “Estábamos la niña, el doctor y yo. Nadie más. Bueno eso pensamos”, contó a Crónica el Lic. Silvero. Y es que unos minutos después al revelar las placas se encontraron con una imagen que les puso los pelos de punta.

En la radiografía se observan unas manos que sujetan a la paciente, como si la estuviesen protegiendo. No pudieron explicar cómo sucedió esto debido a que nadie sujetó a la pequeña bebé en ese instante, según el radiólogo. Aseguran que se trata de un suceso que va más allá de la razón porque supuestamente las manos que aparece en la radiografía son las ¡de un póra! “Nos sorprendió muchísimo. El doctor lo que más se asustó (ríe). Me dijo al día siguiente que esa noche no pudo dormir. A mí me sorprendió mucho también porque nadie sostenía al bebé en ese momento, te puedo asegurar eso”, contó Silvero.

“Además, las manos que se ven son chicas, porque los metatarsianos (parte de la muñeca de la mano) que se observan allí no están luego formados como las un adulto. Es decir, son las manos de una criatura las que aparece sosteniendo al bebé.

A la consulta de si cree que fue algo sobrenatural lo que sucedió, el Lic. Silvero dijo: “Claro que creo. En terapia de niños muchos ya fallecieron, y seguro habrá sido el espíritu de una criatura que está ahí. Espíritus siempre hay en el hospital”, finalizó.

Saben a quienes aparecerle, es lo que le dicen siempre

“Los que vieron la radiografía me preguntan ‘¿no le atajó su mamá, el doctor o una licenciada?’ Yo les contesto que un doctor o una enfermera en su sano juicio nunca le va a atajar a un bebé para una radiografía como esta (del tórax). Lo máximo que le va a atajar van a ser sus manitos”, dijo. “En este caso se ve que se le está agarrando de los dos lados y eso no puede ocurrir. Nadie le atajaba a esa criatura”, añadió.

“De repente preguntan cómo algunos ven y otros no (los espíritus). Los comentarios que siempre se escuchan al respecto es que seguramente saben nomás a quiénes aparecerles”, finalizó.

“Siempre escucho a mis compañeros contar sus historias”

“Hace 8 años que trabajo en el Hospital de Clínicas. Es la primera vez que me tocó algo así, pero siempre escucho a mis compañeros de otros servicios contar sus historias”, confesó.

“A un amigo que es camillero, por ejemplo, le pasó que vio a alguien y de repente ya no estaba. También escuchan voces, siempre se escucha decir eso”, contó. “Los que están en la parte de cámaras a veces escuchan que golpean la puerta y no ven a nadie ni siquiera desde las cámaras. No digo que pasa todos los días, pero cada tanto sucede”, confesó.