El pasado 4 de agosto hubo un asalto en zona del Mercado 4, en Asunción, donde dos sujetos ingresaron al domicilio de Pilar Ibáñez (65), comerciante de nacionalidad boliviana, y a punta de pistola se llevaron 20 millones de guaraníes. Tras varios días de investigación, el 12 de agosto, la Policía detuvo a Richard Ávalos, un vendedor de caramelos, como uno de los supuestos asaltantes.
Gisela Machuca de Ávalos, esposa del detenido, denunció sin embargo que su marido fue injustamente apresado e imputado. El tema sería que existe una denuncia de la víctima hecha en base al testimonio de unas personas que le dijeron que uno de los asaltantes se parecía a Richard. Basados en esto, el Ministerio Público ordenó su captura.
Según informes, el día en que se hizo el reconocimiento entre víctima y sospechosos había cuatro personas robustas y solo Richard era de contextura delgada, lo que le habría condenado, ya que coincidía con la denuncia de que uno de los asaltantes era flaco.
El comisario Abelardo Acosta, en entrevista a Crónica manifestó que ellos solo cumplieron el oficio al detenerlo, pero que no existen pruebas contundentes. Hay unas imágenes de circuito cerrado del momento en que ingresaron a la casa, pero en el video no se puede determinar que sea Richard.
Una de los testigos del atraco, Eustaquia Torrez (61), declaró a la fiscala Belinda Bobadilla que ella conoce al detenido, porque lo solía ver trabajando en el mercado, pero que no podía confirmar que sea él quien cometió el atraco.
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