SIEMPRE tuvo una venda en los ojos, por fin puede ver la realidad, con mucho dolor se lamenta en medio de la soledad.

Te quiero contar mi historia de amor. Me da tanta tristeza revivir un poco del “amor de mentira” que viví al lado de un hombre. Todo pasó tan rápido, estuve viviendo con un hombre 28 años, tenemos 4 hijos juntos, hasta que un día se casó con otra mujer.

De eso ya pasaron 5 años, antes me dolía mucho, pero ahora ya se me pasó. Él se casó con una mujer más vieja que yo. Pero ella tiene un poco de dinero, yo trabajaba como empleada doméstica, no tengo plata, hasta ahora estoy sola…

En ningún momento me mencionó nada, yo me enteré de boca de uno de mis hijos que él se iba a casar, le reclamé pero él se hizo del enojado, seguramente no le importan sus hijos, solo la plata, por eso me cambió. Disculpame, yo nunca me atreví a contarle o hablar siquiera de esto con nadie. Pero ya superé no en todo, pero pasó.

Antes yo no podía salir ni a la esquina porque mi ex no quería, yo creía que él era celoso por mí, pero no, había sido él no quería que me enterara de su matrimonio, pero ya estoy un poco mejor.

La casa de la mujer no conozco, queda un poco retirado de donde yo vivo, ni le conocía, nunca tuve amigas, porque él no quería que yo hablara con nadie. De vista sé que la señora tiene un salón de belleza, seguramente que él me cambió por ella como que yo no tengo profesión ni estudios.

Él siempre fue mujeriego, yo aguantaba todo pero un día le reclamé, pero él se enojó mucho, me insultó tanto, aunque era normal que me maltratara en palabras, siempre fue muy argelado conmigo.

Algunas veces lo suelo ver de ida al súper, pero desde lejos, ya no me molesta más. Ahora estoy más tranquila porque ya nadie me lastima con sus palabras.

Desde que me dejó mi ex nunca más volví a tener pareja, algunas veces quiero pero tengo miedo a que se burle de mí, pero no da gusto estar sola… con tanta soledad.

A veces sueño con enamorarme y tener pareja, pero mi ex me dijo que eso sería imposible, porque nadie se va a fijar en mí porque tengo pocos estudios y me falta profesión. Un tiempo estuve estudiando, pero dejé por culpa suya, porque él no quería que yo saliera de noche, y él también salía a divertirse. Pero estoy pensando que el próximo año empezaré de nuevo, por ahora no puedo porque trabajo en Asunción y alguna vez conocer el amor.

“Gracias por escucharme, porque nunca me desahogué con nadie, tengo vergüenza para hablar de esto”

“Antes yo no podía salir ni a la esquina porque mi ex no quería, yo creía que él era celoso pero no, había sido él tenía otra”

LOURDES, DE VILLETA, 46 AÑOS

LA RESPUESTA: Recuperar la confianza

Trabajar para recomponer tu autoestima

Siempre hay esperanzas para el amor, pero antes creo que necesitás urgente recuperar la confianza en vos misma, esa virtud que se quedó creo como que enterrada con tanta manipulación tu expareja. Sos una campeona, eso nadie te lo quita, pero por más que estás superando con bastante fortaleza todo, a lo largo de estos años, tenés que ponerte a trabajar para recomponer tu autoestima. Ese amor y orgullo propio, tenés todo para empezar y dedicate un tiempo exclusivo para vos sin miedo ni vergüenza.

Al parecer tu ex opacó esas ganas de progresar, de sentirte bien con lo que sos y hacés. A eso me refería con la seguridad, la necesaria para tomar la responsabilidad y decisión en tu vida para ser feliz. Es importante mantenerte alerta de tu manera de comportarte y tus reacciones ante las situaciones de la vida, que vigiles tus pensamientos y todo lo que constantemente te estás diciendo a vos misma. Al examinar e identificar tus pensamientos negativos, podrás dejar de condenarte por tus errores y decir, por ejemplo: “Yo tengo el derecho de cometer errores, ya que así es como se aprende”.

Sobre todo valorarte, lo conseguirás poco a poco, tenés que identificar cada vez que te digas a vos mismo algo que te quite valor. Por ejemplo: “No sirvo para esto”, “nunca voy a aprender a…”, y reemplazarlos por declaraciones más positivas, como: “Yo soy capaz de aprender todo lo que me proponga”. En tus manos está la decisión de hacer mejor las cosas, solo tienes que aprender a valorarte.