Es lo que tiene el fútbol. Luqueño venía de una resonante victoria ante el puntero Olimpia, pero apareció River y le bajó en seco de su arasa mata. Fue 2-1 para el Kelito, que mandó al mazo la euforia del “Chanchón”. Y eso que el partido comenzó bien favorable para el equipo del “Chito” Ayala. Un penal bien cobrado por el árbitro, le dio la posibilidad de llegar al primer tanto con la ejecución purete de Luis Ibarra, que descolocó a Pablo Gavilán para el 1-0.

Pero la alegría del “Chanchón” duró poquito porque Jorge Salinas aprovechó el desconcierto de la defensa para definir ante la salida de Barreto, tras una habilitación de cabeza de “Chiquito” Giménez.

A partir de ahí, el equipo de la banda roja hizo mejor las cosas y antes de la conclusión del primer tiempo, Osmar Colmán marcó lo que sería la diferencia final.

Ayala quiso corregir los puntos flacos de su equipo, dando oxigeno con algunos cambios, pero se quedó ahí, en el intento. Tuvo ocasiones para llegar al empate, pero el travesaño (en un tiro libre de Wálter Ortiz) y otro remate de Arévalos, que salvó Gavilán, le privaron de lograrlo en la complementaria. Fue otro triunfazo del equipo de Phillip para alejarse de cualquier quebranto.

“Ganó porque este equipo tiene huevo”

Pablo Gavilán fue nuevamente la figura del Kelito. Algunas de sus tapadas fueron fundamentales para sostener el triunfo ante Luqueño. A la pregunta del porqué ganó River, tuvo una respuesta tajante: “Ganó porque este equipo tiene huevo. Esto es muy emotivo y me pone feliz, porque a veces tenemos que jugar contra 18 y estamos por muy buen camino”. River se aleja cada vez del descenso.