Ni un director de cine lo hubiese escrito mejor. La final de película que se dio para el tetracampeonato de Olimpia fue espectacular. Guaraní guapeó de lo lindo, estaba 2 a 0 arriba, pero apareció el “Santo” del Franjeado para darlo vuelta.

En una primera etapa donde el Decano era el dominador del partido pasó lo impensado cuando Aquino recibió solo en el área, midió y fusiló a Alfredo Aguilar. El remate se desvió, lo que hizo imposible que el portero pueda intervenir.

En la complementaria fue más fuerte el “nderachóre” en Para Uno porque al toque nomás Guillermo Benítez ponía el 2 a 0 con un verdadero golazo.

Baldazo de agua fría. Pero Roque Santa Cruz estaba tranquilo, en todo momento pedía calma. Y algo sabía. Justamente el capitán descontó tras un pase de Miguel Samudio por el costado izquierdo. Revivía Olimpia con este gol.

Y ese gol llegó, en el descuento, con la lluvia como elemento fundamental para darle más dramatismo a la noche. Centro de Richard, Hugo Fernández de cabeza al medio y Roque “aseguró nomás” el 2 a 2 para el delirio en Para Uno. El festejo de Olimpia campeón ya retumbaba en todo el país. ¡Salud, Rey de Copas!

JUAN LÓPEZ

Floja labor del soplapitos, dudoso en todo momento y tuvo que haber expulsado a varios.

ROQUE SANTA CRUZ

El ídolo y su calma en el peor momento. Su gol revivió al equipo. Mención especial a Alfredo Aguilar.