Cumplió 57 años el sábado, fue una fecha con sabor a tristeza para él, porque ya no podía escuchar a su mamá cantándole “Gigante Chiquito”, como cada año lo hacía.

A Mario Bracho le tocó un 2019 muy duro. En abril se quedó sin trabajo y en octubre perdió a su mamá. El sábado estuvo de cumple y prefirió alejarse de su casa, así como en Navidad y Año Nuevo, refugiándose en la radio (Ñanduti), donde hace su programa.

– Te sucedieron cosas muy fuertes en el 2019. ¿Cómo te sentiste en este cumpleaños por todo eso?

– Justamente por eso preferí estar en contacto con la gente que me quiere. Estar en mi casa sin mamá, en mi cumple, no lo soportaría. Ella me cantaba siempre “Gigante Chiquito” y esta vez esa canción estuvo ausente. Navidad, Año Nuevo y mi cumple estuve trabajando para no estar en casa y sentir ese vacío.

– Vimos en tu publicación que lo celebraste trabajando en radio y con una dedicatoria, escribiendo que había gente que deseaba tu muerte laboral, ¿sentís que era así?

– Y claro, gente marcada por desangrar binacionales, basta con googlear y te darás cuenta.

– ¿A quiénes te referís, a gente del mismo Canal donde trabajaste?

– Las jefaturas son transitorias, ya van a caer por su mismo peso.

– ¿Qué estás haciendo además de la radio?

– Y tengo 6 horas para hacer lo que me gusta sin censura. Aparte, estoy con planes de regresar con algún programa en TV, me estoy dando un tiempo para una buena elección.

– Entonces, no le decís un adiós a la televisión, estás con planes de volver.

– Claro que sí, no le robé a nadie y no merezco estar fuera, pero respeto las reglas de este raro y sucio mundo de la comunicación donde no todo es lo que parece.

– Se acercan las elecciones municipales, cuando dejaste la televisión habías comentado que te ofrecieron candidatar para intendente o para concejal para Asunción, ¿eso sigue vigente?

– Nooo… Cada vez que decía eso era nada más que una expresión de deseo. Mi ámbito es servir en lo que humildemente pueda y no dejé de hacerlo. Lastimosamente esa figura de la ayuda solidaria a personas que realmente merecen no prendió, parece.

DE CALLE Y DE NOCHE

La cobertura nocturna es un mundo aparte dentro del periodismo. Mario Bracho la hizo suya por 20 años. “Buscaba historias”, dijo a Crónica el periodista. Contó que sentía la necesidad de estar en el lugar de los hechos y, por sobre todo, porque a la noche las noticias que se pueden encontrar y recoger son diferentes.

FUERA DE LA TV

Mario Bracho quedó fuera del SNT en abril del año pasado, después de que apareciera su nombre en una supuesta lista de periodistas que recibían coimas del entonces director del hoy desaparecido Departamento Técnico Aduanero de Vigilancia Especializada (Detave). Él había hecho su aclaración negando la acusación pública y hasta abrió las puertas de su casa para mostrar las condiciones de pobreza en la que estaba viviendo.