Doña Petrona Segovia vive en el barrio Aldana Cañada de Capiatá. A sus 79 años disfrutó por primera vez de la hamaca que le construyó su propio hijo

Lágrimas y sonrisas caían en cada balanceo. El leve soplo en el rostro dejaba ver la contagiante emoción tras ese infantil juego que llenó de felicidad a toda una familia. Los roles cambiaron, y ahora era ella la que disfrutaba de ese empujón que no solo la llevaba a recordar ese pasado que nunca se fijó en su memoria, sino también le dejaba ver el alegre presente que vino desde la persona a quien alguna vez también empujó a la vida.

“Esta es la primera vez que yo me hamaco, no disfruté de mi infancia porque desde que era muy chica ya me dieron y tuve que trabajar”, dice en ese histórico momento doña Petrona Segovia al recordar su dura infancia.

Pese a eso, los pensamientos negativos no se hicieron presentes en ese especial encuentro. Toda la familia gozaba de la felicidad que sentía la mamá guasu de la casa. Doña Petrona, a sus 79 años, supo por primera vez lo que significaba ese pequeño juego que marcó la niñez de muchas personas.

“Ella es una señora muy sacrificada… nos contó su historia mientras disfrutaba del viento. Nosotros estamos muy felices por tenerla con nosotros”, dijo a Crónica Martín Ferreira (54), hijo de ña Petrona.

La experiencia fue inolvidable, esta orgullosa mamá se complacía con cada ida y venida que le regaló este mismo hijo, ya que fue también él quien construyó la tradicional hamaca.

“Hice una hamaca y le dije a mi mamá si quería probar. Ella me dijo que nunca se había subido. Entonces me encargué de que eso pase en su vida. Estuvimos todos demasiado emocionados con todo”, expresó don Martín.

“Ahora vas a poder hamacarte todo lo que vos quieras mamá”

Tanto nietos como hijos disfrutaban de la alegría de doña Petrona. La gran sonrisa no cabía en su rostro, y por ello trataba de contagiar a todos de su misma felicidad. “Ella siempre nos dio ánimos. Es muy sufrida y supo criar a sus 6 hijos. No nos podemos quejar de ella” dijo karai Martín.

Tras ese momento que quedará siempre guardada en sus memorias, el hombre afirmó que ahora su madre va a disfrutar todo lo que no supo cuando tenía la edad, y que tanto él como toda su familia se encargarán de eso. “Ahora vas poder hamacarte todo lo que quieras mamá”, comentó Martín que le dijo a su madre.

DATOS

COMPAÑÍA

Martín contó que quien se encargó de dejar grabada la gran experiencia de ña Petrona fue su nietita, una niña con síndrome de Down que todos los días la acompaña en sus quehaceres.

SE VIRALIZÓ

El video en donde la abuelita goza de los balanceos fue publicado en las redes sociales de Grisel Ferreira, hija de don Martín, quien recibió atýra felicitaciones por el regalo a su abue.