Olimpia tenía todo para ganarlo, pero se durmió y Delfín lo empató en la etapa complementaria tras un error defensivo. ¡Ndiii!

Era para un paseo, pero… no fue su noche. La Copa Libertadores comenzó para Olimpia con un sabor agridulce. Si bien sumar afuera es la consigna siempre, ayer el conjunto de Daniel Garnero tuvo para ganarlo al Delfín, en Ecuador.

Y eso que comenzó bien con el gol en contra de Luis Cangá luego de un cabezazo de Antolín Alcaraz.

En esa primera mitad el Decano tuvo para hacer otro gol más por lo menos, pero faltó afinar la puntada final. El local estaba confundido y la única forma que llegaba al arco franjeado era con la pelota parada, el problema de siempre en el tetracampeón.

En la complementaria, cuando todos esperaban que el Decano iba a salir a buscar a liquidar el partido, se quedó un poco, se durmió y en una de esas jugadas, Delfín lo empató. Richard Ortiz se equivocó en zona peligrosa, lo que aprovechó correctamente Martín Alaniz para igualar las acciones.

La “O” sufrió en el segundo tiempo, y hasta el travesaño lo ayudó en dos ocasiones de un peor resultado.

Pero así también tuvo para anotar y traer los puntos a Asunción, cosa que al empezar parecía muy factible.

El equipo de Garnero no convenció del todo y en casa debe hacer pesar la localía la semana que viene contra Defensa y Justicia.