Mucha gente le critica por su decisión muy extrema, otros le apoyan.

Larissa Riquelme está siguiendo el avance del coronavirus. Como conocedora de gran parte del mundo, por sus constantes viajes cuando era conocida como “La Novia del Mundial”, siente mucho más cerca todo el caos que está generando en cada país donde llega, con eventos suspendidos, colegios cerrados y el pánico en la población. Este último efecto ya le agarró a ella sin estar en ninguno de los países afectados. Bueno, indirectamente, sí, si tenemos en cuenta que su novio Jonathan Fabbro está privado de su libertad en Buenos Aires, donde ya llegó el virus.

Ella prefiere prevenir antes que lamentar y por eso ya tomó una medida drástica y un poco extremista. A través de sus redes ya pidió disculpas a la gente si por ahí no les saluda como acostumbra a hacerlo habitualmente. Ya entró en pánico y teme que alguien ya esté teniendo el virus. Por eso, decidió no saludar más con besos ni pasando la mano a nadie. “Vamos a evitar todo tipo de contactos”, dijo. Atendiendo a que muchos ya le están tratando de exagerada, dijo que no le importa, pero que es mejor cuidarse. “Seré un poco extremista, pero lastimosamente debemos de cuidarnos”, aclaró. Mucha gente le trató de exagerada y hasta de ridícula por su decisión. Otros, sin embargo, en especial sus seguidores que viven en países ya afectados, como México y Ecuador, le felicitaron y le dijeron que la mejor medida es encerrarse y no salir, pero si eso no se puede, se debe evitar el contacto con otras personas. Larissa, por el momento, no tiene la opción de quedarse en su casa porque tiene que salir a trabajar.

Mientras, el coronavirus todavía no llegó a Paraguay. Junto a Venezuela, Colombia, Perú y Bolivia, estamos en la lista de los países libres del virus, hasta el momento.