Dida, exlateral izquierdo azulgrana, destacó lo bien que le trataron en Barrio Obrero, se acordó del gol de mediacancha que le hizo a Cobreloa y anhela conocer LNO.
- POR JORGE IZQUIERDO
“Me alegra que se sigan acordando de mí, se nota que hice bien las cosas y eso me llena de satisfacción personal. Estoy muy contento por eso”, así arrancó diciendo el expelotero de Cerro, el brasileño Dida (54 años), en charla con Crónica.
El exlateral izquierdo se mostró muy amable en todo momento de la charla y recordó lo que fue su paso por el Ciclón en 1993.
“Fue lastimosamente un periodo corto. Les juro que me hubiera gustado haberme quedado más tiempo. Pasé muy buenos momentos. Los paraguayos son muy calurosos, son gente extraordinaria. Me trataron bien en todo momento y eso lo voy a valorar siempre. Le agradezco mucho a los cerristas, es una afición sorprendente, se parece mucho a la hinchada de Flamengo, Corinthians o Palmeiras”, expresó Dida.
Siguiendo con lo deportivo, el brasileño habló de la Copa Libertadores de ese año, en el que Cerro cayó eliminado en semifinales ante el São Paulo: “Aquel equipo del 93 pudo marcar historia. Teníamos un muy buen equipo, yo digo que nos faltó tenernos más confianza ante São Paulo. En Brasil perdimos 1-0 y lo podíamos remontar en casa, no pudimos hacer un gol y lo pagamos caro en la revancha (el partido de vuelta terminó 0-0)”, agregó el exjugador desde la ciudad de Curitiba, donde vive.
Dida confesó que perdió totalmente el contacto con sus excompañeros. “Hace tiempo que no sé nada de ellos. Con ‘Chiqui’ Arce me crucé hace unos años acá en Brasil, pero de los demás ya no sé nada”, remató el rapai.
Su llegada a Cerro, por medio del técnico Paulo Carpegiani
En 1993, el entrenador del Ciclón era el brasileño Paulo César Carpegiani, y fue éste quien pidió a Dida para que venga a reforzar al Ciclón. “Hablé con Carpegiani y me dijo que quería que vaya a jugar en su equipo. Me pareció un lindo desafío, me fui únicamente para jugar la Copa Libertadores”, le bajó nuestro entrevistado.
“No me olvido del gol que le hice a Cobreloa (en Calama), desde muy lejos (fue de mitad de cancha y Cerro ganó 2-0). Hasta ahora algunos me recuerdan por ese gol”, remató el brasileño.
“Veo en fotos y el estadio es una maravilla”
Dida también tiene un deseo muy grande, y es el de conocer “La Nueva Olla”, de Cerro. “Voy a hacer todo lo posible para ir, veo en fotos y el estadio es una maravilla. Creció muchísimo Cerro en cuanto a infraestructura. Me imagino que cuando se juegan los partidos ahí, es algo fantástico”, culminó el hoy en día DT.
Lo que más le gustaba era el tereré y la chipa
Durante su estadía por Paraguay, Dida tuvo que adecuarse a todo, principalmente al calor. “La verdad que me fui en la época donde hacía más calor, que fue a principios de año. Aprendí a tomar tereré, tomaba mucho luego, me gustaba. Comía la chipa, era muy rica. En Paraguay hacen ese asado y lo acompañan con sopa, qué delicia, algún día volveré por ahí. Fue una experiencia muy linda el haberme ido a jugar en Cerro Porteño”, sintetizó nuestro entrevistado.
Los compas con los que mejor se llevaba en Cerro
En cuanto al vestuario de 1993, Dida contó que se llevaba bien con todos, pero con dos jugadores se entendía mucho mejor. “Había un buen ambiente, nos llevábamos muy bien. Me acuerdo de todos, Faryd (Mondragón), Carlos Gamarra, Struway, Virgilio (Ferreira), Gustavo Sotelo, por nombrarte a algunos de ellos. Pero me entendía mejor con Alex Rossi y ‘Cha-Cha’ Chávez, por ser brasileños”, remató el hombre de nombre Marco Aurelio Morais dos Santos.
El estilo de música que le gustaba acá
Si hablamos de diversión, ese es uno de los fuertes que tenemos los paraguayos y Dida lo supo disfrutar. “Se escuchaba mucho la cachaca, casi siempre ponían eso en los vestuarios y concentraciones. Me gustaba mucho cuando estaba por allí”, dijo el rapai.
Al ser consultado si durante su etapa en nuestro país logró aprender algo en nuestro dulce idioma guaraní, Marco Aurelio señaló que “la palabra que hasta ahora uso es nderak…, eso aprendí. Ya han pasado muchos años de haber jugado en Cerro, pero se me quedó esa palabra”.
“Yo me retiré en el año 2000 del fútbol. Hasta hace un tiempo estaba dirigiendo, trabajando con inferiores, luego estuve como comentarista de televisión en los partidos del Brasileirão. Ahora estoy libre, pensando en qué hacer”, finalizó.
Comentarios