En pleno sábado de gloria, una señora volvió de la funeraria al hospital, donde ahora se encuentra estable. “Es un acto criminal”, denunció la hija.
“Iformaleterei la doctor. Ojapo orerehe petei acto criminal. Inhumano. Yo no le deseo a ningún prójimo el calvario que nos hizo pasar este doctor.
Pasamos un calvario por culpa de este doctor que nos dijo que mamá murió”, fueron las primeras palabras que salen de Sandra, aún shockeada después de ser testigo de cómo “revivió” su mamá, doña Gladys Rodríguez, por culpa de lo que el la considera fue mala praxis del médico que la atendió, quien según la denuncia policial que se hizo, es Heriberto Vera del Sanatorio San Fernando de Coronel Oviedo.
La mujer, quien según comentó la hija es una paciente oncológica, se venía sintiendo mal.
“El jueves nosotros salimos de la internación. Ya se venía tratando luego. Pero el viernes estaba más o menos otra vez. El sábado ya no amaneció bien.
Mal le vimos. Entonces le llevamos de vuelta. Ahí le pusieron suero y yo le dije al doctor ‘le veo mal a mi mamá. Está muy morada’. Pero no me hacía caso. Cualquier cosa me decía. Ahí yo le dije ‘doctor, si no vas a hacer nada le vamos a llevar a otro lugar’” fue el relato desesperado de la hija.
“Yo le ataqué mucho y ahí le puso oxígeno. Y me tenía con que ‘le vamos a recuperar, vos salí nomás allá’. Después ya se desmayó de tan mal que se sentía. El doctor desconectó todos los aparatos y me dijo ‘acá ya no hay nada que hacer’ y ya nos dio la orden de defunción y ya le llamó a la funeraria y le mandó a la morgue”, dijo la señora.
El cuerpo fue puesto en una bolsa mortuoria, se les entregó el certificado de defunción y se fueron. Al llegar a la funeraria… ¡pillaron que estaba viva!
“¡Señora… señora! ¡Tu mamá está viva!”, dijo el funcionario
Cuando iban a proceder a hacer lo que normalmente se hace con los finados en una funeraria, un funcionario del lugar se pegó el susto de su vida al ver que la persona que tenía que preparar ¡aún respiraba!
‘“¡Señora… señora! ¡Tu mamá está viva!’, me dijo la persona que le atendió a mamá en la funeraria. Demasiado grande nos shockeó a todos.
‘Llevale de vuelta que se le atienda’, me dijo, y ahí nos fuimos. Volvimos al sanatorio y cerraron todo, okañy hikuái. Ha ropyta ore okápe con mi mamá”, contó Sandra.
Finalmente se la llevó al IPS de Oviedo, donde se encontraba estable al cierre de la edición.
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