La tremenda sequía que está afectando a esta nuestra región también le perjudica ferozmente al otrora caudaloso río Paraná.

Ahora, con la falta de agua están quedando a la vista de loperro muchos objetos que estaban ocultos bajo el caudal del río.

Días atrás, un ciudadano rapai estaba recorriendo por los cauces secos, mironeando upérupi los restos de las embarcaciones hundidas, hasta que hesapo por una pequeña embarcación que le pareció conocida. Era una lancha con casco de fibra de vidrio, que estaba intacta todavía, se acercó a ella y se le salieron los ojos al ver que poseía todavía la matrícula. Esa nave era de su padre, quien se había desaparecido con lancha y todo hace ¡40 años atrás! A metros nomás había unos huesos de restos humanos, aunque aún no se tenía la certeza si pertenecen a su desaparecido padre. Hasta el momento no se sabe si el hombre va a gestionar para llevarse los restos óseos, ya que se lo tiene que someter a un estudio forense para determinar si corresponden a su papá desaparecido en 1980.

FRONTERA CERRADA. El karai vive en la ciudad de Foz de Iguazú, pero debido al cierre de las fronteras, no se puede realizar ningún trámite todavía para reclamar la embarcación.

Ahí hay varias camionetas avei

Pero ojo, no solo restos de embarcaciones ojetopá en el cauce casi seco, también fueron encontrados una gran cantidad de relojes, que se presume que eran de algún sacoleiro. Además ojetopá una moto de agua, los restos de varias camionetas que quien sabe-pa cómo llegaron al caudal hídrico.

Este bajón está llegando a niveles críticos, debido a que los buques cargueros no pueden operar con esas aguas tan bajas. Se espera que las próximas lluvias ayuden a mejorar el nivel de las aguas de los ríos Paraná y Paraguay.