Mucho antes de la cuarentena ya tenían problemas bajo las sábanas, solo que antes no había tiempo para pensar, pero ahora hay de sobra y siente que el distanciamiento es cada vez mayor entre los dos

Hola, soy una mujer de 35 años, tengo mi esposo de la misma edad, realmente yo soy una persona que necesita de sexo y él es muy tranquilo, no demuestra ganas, interés en tener relaciones conmigo. Lo único que hace es ver la tele, ver películas y luego se da vuelta y duerme, antes yo le buscaba y teníamos relaciones, pero es como que ya me está cansando.

Sin embargo, yo no quiero perder mi matrimonio, porque él es muy bueno, no toma, no sale, es muy buen papá y está siempre con nosotros. Solo el sexo es nuestro problema o sea mi problema, yo trabajo en un lugar donde hago guardias de 24 horas, si quisiera podría tener otro también, pero pienso que tengo mucho que perder.

Mi marido es muy bueno, porque él nos da todo, no nos hace faltar nada ni siquiera él nos falta, ni pelota juega, es muy hogareño, solo le falta tener más ganas. Y yo no soy ni gorda, me mantengo bien, me cuido mucho, soy muy limpia.

Realmente no le quiero decir, no quiero pedirle eso, y para decir que es por el tema del Covid-19, no es, ya viene de mucho antes esto. Y no sé qué decirle, no quiero que note por mi nada. Y por las noches, cuando estamos juntos, cada uno por su lado de la cama, pienso en separarme, pero tengo mucho miedo.

Otro pensamiento que me agarra es no separarme y estar con otro porque yo te digo que hombres no me van a faltar porque hay muchos que me demuestran que quieren tener sexo conmigo. Me pregunto por qué él es así y pienso, capaz tiene otra y ya le gusta, es lo único que puedo pensar.

Y pienso muchas cosas, siento que estoy desperdiciando mi tiempo acá. Hay una persona con quien salí antes y cuando tengo mucha rabia mensajeamos y me dice de todo, me hace propuestas que no me son indiferentes. Solo que tengo miedo de muchas cosas y a la vez pienso que me haría bien irme un rato con él solo para tener relaciones, porque como digo, pienso en dejarlo pero no me decido, es muy difícil. Esa persona es separada, pero tiene su pareja, yo no quiero tener nada serio con él, si es que llego a salir solo saldría por sexo.

“REALMENTE NO LE QUIERO DECIR, NO QUIERO PEDIRLE ESO, Y PARA DECIR QUE ES POR EL TEMA DEL COVID-19, NO ES, YA VIENE DE MUCHO ANTES ESTO”

IGNACIA, 35 AÑOS, DE CONCEPCIÓN.

LA RESPUESTA: APRENDER A NO GUARDAR LAS EMOCIONES

Cuando el sexo queda muy abajo en la lista de las prioridades

Separarse o darle chance a la relación no es una decisión que se puede tomar de la noche a la mañana ni por consejo de nadie. Es una determinación personal basada en hechos y sentimientos, más toda una historia de pareja que en conjunto deben plantearse.

Si estás pensando en tener una aventura o amante ocasional en estos momentos es muy arriesgado por las probabilidades de contagio del Covid 19. Si bien el estrés puede tener una gran repercusión en la vida sexual, si la falta de interés por la intimidad viene de hace tiempo, lo ideal es conversarlo con tu pareja, ver cuál es el problema que impide el bienestar de uno o ambos integrantes.

Son conflictos de los cuales tal vez no tenían el tiempo de hablarlo como ahora existe con las restricciones o recomendaciones de quedarse en casa para cuidarse de la pandemia. Si aun así, conversando, no logran llegar a un buen puerto es importante pedir ayuda profesional y sostener una terapia, hoy día virtual, para tener una idea más clara de la situación y donde están ubicados.

Cuando en una pareja, uno tiene el nivel de deseo sexual más alto que el otro, la falta de intimidad física puede volverse en una fuente de resentimiento, lo que implica estrés que va aumentando con el tiempo y, a su vez, coloca al sexo hacia abajo en la lista de prioridades.

Cuando no se quiere hablar de este tema por miedo a que la pareja piense mal o se enoje, hace que las emociones se guarden, generando en algunos casos, ansiedad, depresión y una serie de comportamientos poco saludables. Anímate a confrontar la situación y “espantar los pingüinos de la cama”.

Gracias por escribirnos a este espacio gratuito para consultar y contar tu caso al WhatsApp (0983) 910-842.