Su “superescudo” no los protege más. Sin fueros, son como cualquier Juan Pueblo. Y por las cosas que hicieron, tendrán que enfrentar a la Justicia que, en el peor de los casos para ellos, podría incluso dictaminar que vayan a la prisión.

Es que en la sesión de ayer, que se llamó exclusivamente para tratar este y otros casos de emergencia, la Cámara de Diputados aprobó la solicitud de desafuero de la colorada Del Pilar Medina y del chovy Édgar Ortiz.

La legisladora fue procesada por la Fiscalía tras violar el protocolo sanitario establecido por el Gobierno en el combate al coronavirus. De acuerdo al informe fiscal, Medina realizó un viaje al Perú a pesar de las prohibiciones que rigieron desde el pasado 10 de marzo. Además, la legisladora tampoco respetó la obligación de guardar aislamiento debido a que venía del extranjero.

En el caso de Ortiz, fue imputado por violación de la cuarentena, a las normas sanitarias y resistencia, tras atropellar una barrera policial en el distrito de Cambyretá, Itapúa, porque ndajeko tenía que ir al baño.

Ambos deberán ahora enfrentar a la Justicia y someterse a lo que la misma sentencie.