Ayer se celebró el Día de la Tierra, una fecha que nos recordó lo importante que es cuidar nuestro hogar, que ahora con la cuarentena planetaria nos está dando muchas lecciones sobre los efectos dañinos de las actividades humanas. En países como China, Italia y España la calidad del aire mejoró a raíz del distanciamiento social, por ejemplo, y eso es algo que también ocurrió en Paraguay, especialmente en la capital.

“La concentración de gases en la atmósfera, lo que miden los satélites, eso sí ha disminuido. Pero eso no quiere decir que esto sea duradero. Ahora, en Wuhan a medida que retoman las actividades la calidad del aire va empeorando devuelta. Con esta cuarentena se puede decir que fuimos testigos de que cuando hay un cambio en la forma en que nos desarrollamos día a día como sociedades, apuntando hacia hábitos que favorecen a la naturaleza, el efecto es inmediato”, mencionó a Crónica Óscar Rodas, director de la Oficina de Cambio climático en Paraguay de la WWF.

Muchos son los efectos que con esta restricción van dando a la Tierra la posibilidad de restablecer su equilibrio. En Asunción, según he’i Rodas, con el mejoramiento de la calidad del aire los alérgicos no tienen tantos problemas respiratorios, por ejemplo. Incluso, en ciertos lugares de Central, como el lago Ypacaraí, como el arroyo Yukyry que se contaminaban bastante a causa de las fábricas en su cuenca, el agua mejoró por el paro de las actividades.

LIMPIEZA ES SALUD. Si la polución es mucha y la calidad del aire es baja, eso causa enfermedades respiratorias en las personas, que lo hacen más susceptibles a los virus.

“Que sea un tiempo de reflexión”, pide ambientalista

Mantener a la Tierra limpia es un trabajo de consciencia individual, ya que volver a la normalidad podrían revertir todas estas recuperaciones. “Todos estos efectos que se ven ahora son transitorios a pesar de esto tan triste que estamos viviendo, el mensaje que queremos dar es que este sea también un tiempo de reflexión.

Para que en un futuro cercano, cuando pasemos la curva de la enfermedad, ya no volvamos con los mismos hábitos; que usemos transportes eléctricos antes que a combustibles, que se use más la bicicleta, apuntar a una alimentación más saludable y ecológica con productos que se producen localmente, valorar más nuestros parques naturales. Que esta crisis tan triste y tan costosa en vidas humanas nos sirvan para que como sociedad planetaria podamos vivir de forma más armónica con la naturaleza”, dijo Rodas.