Antonia Báez (61), una pobladora del barrio San José, distrito Villa del Rosario en el departamento de San Pedro, es devota de la Rosa Mística y contó sobre su gran experiencia con esta santa.

“Todo empezó cuando yo le encomendaba a mi hijo que iba a ser trasplantado. Un día amaneció así, goteaba agua de su rosario. Me sorprendió muchísimo y mi fe se hizo más fuerte”, expresó la mujer a Crónica. Tras el impactante suceso, contó que tanto ella como sus familiares fueron testigos de milagros realmente sorprendentes.

“A uno de mis hijos le iba a donar su riñón su hermano, pero después de todo lo que nos pasó apareció otro donador y pudieron hacerle su trasplante. Después de muchos años, él está más sano que nunca, increíble como está”, dijo avei la mujer.

Contó que su fe creció más desde esa vez y también para todos los vecinos y amigos que están cerca de ella. “Yo estoy muy feliz por todos los milagros que les hizo la Virgen a todos los vecinos. Hay demasiados testimonios que no voy a poder contar todos”, le bajó avei.

Aseguró avei que también se encomiendan a la Rosa Mística para que les proteja del virus vai que vino a nuestro país, además para que les provea de alimentos.

FARRA DE AQUELLAS. Doña Antonia contó que todos en su barrio se volvieron muy devotos a la Virgen, por lo que cada 13 de julio hay feroz farra en la zona. “Es impresionante cómo es la fiesta, ella es nuestra madre”, dijo la mujer.

LE SALVÓ DE LA MUERTE. Doña Antonia contó avei que la Virgen le salvó de la muerte a uno de sus sobrinos debido a que se salvó jey tras un disparo en la cabeza. “Los médicos ya no le daban esperanzas de vida, pero la Virgen intercedió”, he’i.

No puede cerrar puerta a los visitantes de la Virgen he’i Antonia

Doña Antonia aseguró que ante las disposiciones sanitarias con respecto al aislamiento social se ve en la obligación de regular las visitas a la capilla de la Rosa Mística debido a que no puede haber aglomeración. “No pueden juntarse acá, por eso trato de cuidar un poco las personas que vienen a visitar. No puedo cerrar las puertas. No tengo miedo del virus, pero sí de las autoridades porque se tiene que cumplir la ley”, dijo avei la mujer.

Contó que de lugares alejados avei se van a visitar a la santa gracias a los milagros que concede a todos sus devotos. “Ella es muy querida acá, tiene demasiado fuerza. De todos lados vienen a visitarle y eso a mí me pone muy contenta”, dijo ña Antonia a Crónica.