Una verdadera pena es la situación que está padeciendo una humilde familia de la compañía Typychaty, de la ciudad de Guarambaré.

La situación pandémica vino a agravar el problema del pequeño Jesús (2 años), un niñito que nació con parálisis cerebral, por lo que requiere de alimentación y cuidados especiales. “Mi marido trabaja en la olería ha ko’aga no hay trabajo por el virus. Y mi hijito nació con problemas y no podemos llevarle ni en el hospital siquiera”, he’i doña Norma Elizabeth López a Crónica.

Ellos viven en una pequeña pieza, que es compartida por los seis integrantes del clan familiar. “Gracias a don Mariano y su grupo que reparó el techo de nuestra pieza, porque chorreaba todo cuando llovía, ahora por lo menos ya no va a gotear cuando llueve, pero a Jesús le falta para su anticonvulsivo. Además hendy porque ni el Pytyvõ ni el Ñangareko nos llegó, eso íbamos a usar para comprarle para su leche fórmula que toma”, dijo doña Norma.

“Ahora juntamos poha ro’ysa y una señora de Guarambaré nos compra en esta crisis para ayudarnos. Hace poco que mi bebé come, toma caldito de pollo, de carne molida, pero eso tiene su costo y si no tenemos trabajo es muy difícil, gracias a los vecinos que nos dan una mano podemos comer”. Si podés tender una mano solidaria a Jesús llamá al (099) 310-646.

ENTRE 6 OIKO HIKUÁI. “Cuando les visitamos, ho’a nuestra alma por el piso al ver que viven entre 6 en una pieza de 3,5 x 3,5. Ahora les arreglamos el techo, pero necesitan ayuda” nos dijo don Mariano Valdez.