Las iglesias están vacías cada domingo, pero no por falta de fe, sino a causa del virus vai que mandó ya hace casi dos meses al rollo a sus casas. “Cada misa sin los fieles es triste, pero es por una buena causa. Y en la presencia de Cristo estamos bien”, empezó diciendo monseñor de Caacupé Ricardo Valenzuela.

Dentro de toda esta situación alarmante rescató que no todo es malo, y que se nota a una nación más unidad en la fe, e incluso se dan casos de gente que no creía y ahora ya creen en Ñandejára.

“Tenemos conocimiento de gente atea o personas que estaban alejadas de la fe y que, con este tema de la pandemia, empezaron a acercarse (a Dios). Incluso están pidiendo asistencia espiritual a sacerdotes”, dijo el religioso.

Relató que en momentos de crisis es donde Dios está probando la fe de su pueblo. “Pasó en otras pandemias y vimos que hubo una revolución de fe increíble. La gente clamó mucho al señor”, enfatizó.

Por otro lado comentó que están atendiendo casos urgentes por teléfono. Si hay alguien que de manera urgente necesita contención espiritual, a ellos los escuchan mediante teléfono y le dan sus consejos.

También comentó que hay muchas personas están con el tema de que tienen familiares en el exterior. “Llaman mucho a decir que están preocupados por ellos porque hay quienes intentan venir, pero no pueden pasar y los familiares preocupados buscan con nosotros esa contención espiritual”, dijo el padre Valenzuela.

Las iglesias siguen haciendo sus misas, pero a puertas cerradas y eso todavía seguirá siendo así debido a que de acuerdo a la cuarentena inteligente todo este invierno seguirían las cosas así.

LEVANTA DEFENSAS. El padre de la “Capital Espiritual” del país instó al rollo a estar constantemente orando. Aseguró que la oración incluso levanta las defensas y cambia el estado de ánimo de la gente.

A CABALIDAD. Todos los sacerdotes están cumpliendo a cabalidad la cuarentena para ser ejemplo también para la sociedad he’i. Todos los días tienen su tiempo de leer la Biblia y rezar para Ñandejára, según manifestaron.

Está en la duda lo que pasará en diciembre con la festividad

Una cosa que todavía está en la incertidumbre es ¿qué pasará allá por diciembre? ¿Será que la festividad de Caacupé se hará como siempre?

Al respecto monseñor reconoció que las respuestas todavía no las tiene, pero que todo dependerá de la respuesta ciudadana a los pedidos de distanciamiento social que hace el Gobierno.

“Lo más probable que muchos ya estarán haciendo sus promesas pidiendo que está situación pase pronto”, dijo.

Por otro lado el sacerdote dijo que la fe tiene mucho que ver también para sobrellevar emocionalmente la pandemia, como así también en los resultados que puedan obtenerse, pues en la Biblia está que Kirito escucha las súplicas de su pueblo, he’i.