El exlateral zurdo charrúa repasa su carrera deportiva con Crónica y cuenta detalles imperdibles.

• POR JUAN VICENTE DUARTE

Cuando Diego Ciz aceptó la oferta de venir a jugar por Olimpia, allá por el 2007, jamás imaginó que aquello sería el inicio de su romance con Paraguay, al que ya adoptó como su país.

“Llegué con un poco de temor, porque no sabía cómo iba a ser, todavía era muy joven y fue mi primera experiencia en el exterior. Pero una vez que empecé a vivir el día a día y a conocer la idiosincrasia del paraguayo me encantó, tanto que cuando me fui en el 2010 me daba cosa dejar el país”, relata de entrada y con total sinceridad, este zurdo y aguerrido lateral izquierdo charrúa, hoy retirado de la actividad profesional.

Diego tuvo sus inicios en las inferiores de Peñarol, de donde salió para ser campeón con un equipo recién ascendido y del interior: Rocha FC. “Hicimos una gran campaña, salimos campeones, en un grupo donde había grandes jugadores, lo que a su vez fue como una hazaña, por tratarse de un club del interior, frente a grandes equipos como Peñarol y Nacional. Al año siguiente jugamos la Copa Libertadores y luego se me terminó el contrato”.

-¿En qué momento decidiste fichar por Olimpia?

-Tenía tres opciones. Una era de Nacional de mi país, otra de Godoy Cruz de Mendoza y la de Olimpia. A Nacional no quería ir por mi pasado en Peñarol y Argentina no me gustaba mucho. Y bueno, Olimpia ya era el ‘Rey de Copas’. Además, tenía la referencia de que muchos uruguayos ya habían salido campeones de América con el club, como Ro-Ro (Rodrigo López), (Sergio) Orteman y estaba el “Tato” (Martín) García, que fue compañero mío en las inferiores de Peñarol. Ahí dije, bueno, vamos a Paraguay.

-¿Qué fue lo que más te gustó de nuestro país?

-Y todo, el cariño, la amabilidad, cordialidad y hospitalidad de la gente. Además de la tranquilidad que hay en el país.

-¿Qué representó Olimpia en tu carrera?

-Fue lo mejor y más importante en mi carrera profesional. Por lo que representa y porque pude dejar una huella en el club. Lastimosamente no pude salir campeón con el club, porque en ese tiempo había mucha inestabilidad y había grandes problemas dirigenciales, pero haberme ganado el reconocimiento, el cariño y el corazón de la gente, es algo que me llena de orgullo.

SUS CLUBES. Peñarol, Rocha FC, Olimpia, Rapid Bucarest, Sol de América, Sportivo Luqueño, Rubio Ñu, River Plate. Sportivo San Lorenzo y Deportivo Recoleta (ascenso).

DOS TÍTULOS. Son los que consiguió Diego en su carrera. En la categoría profesional con el Rocha FC de su país (2005) y con San Lorenzo en la Primera B (2017).

Casamiento “a lo paraguayo” y con aopo’i

Para dar fe de que Diego Ciz no solo “se casó” con Paraguay, también nos relató su decisión de casarse con su novia, en nuestro país. Y atendé los detalles. “Queríamos formalizar, y decidimos casarnos por civil. Se lo comenté a Martín (Ligüera, compañero suyo en Olimpia) que también estaba de novio, para hacer lo mismo.

Bueno, aceptó y lo hicimos en mi casa. Y con el detalle de casarnos con ropa de aopo’i. Estuvo buenísimo, porque Martín tenía una camisa blanca y combinaba con el vestido blanco de mi señora, y yo al revés, con una camisa verde, que hacía juego con el vestido del mismo color de la novia de Martín.

Fue muy divertido y de testigos estuvieron unos amigos uruguayos. Fue una época muy divina”, recordó. Diego tiene dos hijos paraguayos, Martina y Ezequiel.

Jugar en la nieve de Rumania “fue una experiencia increíble”

Diego tuvo un breve paso por el Rapid Bucarest de Rumania, en la temporada 2010. “Siempre fui ambicioso y surgió la posibilidad de ir. Era un buen equipo y en lo económico me iba a ayudar. Salimos en marzo con una temperatura de 40 grados y llegamos con menos 10 grados allá, terrible fue.

Lo simpático es que cuando iba a debutar, fuimos a hacer el reconocimiento y la cancha estaba llena de nieve. Ahí le pregunté a un compañero brasileño: “¿Jogamos?” y me contestó, “Se joga”. Yo no podía creer, marcaron la cancha con rayas rojas, la pelota roja, fue una experiencia increíble”, relató.

Marche un delivery con las delicias de “Martinucky”

Diego y su esposa tienen un negocio gastronómico, que lo montó hace 5 años.

“Al estar radicados en Paraguay, pensamos en el futuro y también para que mi señora pueda tener alguna actividad. Ella siempre tuvo el sueño de tener su propio restaurant y surgió “Martinucky” cafetería, que también ofrece un servicio integral de comidas. Ahora que está todo parado, cayó bastante pero hacemos el servicio de delivery, con un menú semanal. Por suerte, estamos teniendo bastante receptividad”, agregó.

“Ro-Ro”, su gran amigo en el fútbol y un referente para él

El mejor amigo que le dio el fútbol a Diego Ciz fue su compatriota Hernán Rodrigo López.

“Ya nos conocíamos, pero nunca lo traté como cuando fuimos compañeros en Luque, que estaba en zona de descenso. La verdad, me asombró. Era impresionante, porque no solo metía goles (hizo 17 en ese torneo), hacía jugar a todo el equipo, la forma como lideraba y más aún que vino de Cerro Porteño con una lesión y prácticamente sin jugar. Es un crack, además es una buenísima persona, un gran compañero”.

Agregó también que le pone muy contento el presente de Rodrigo Rojas.

“Fui su compañero en la época difícil en Olimpia y me alegra que él haya logrado lo que yo no puede, porque se lo tiene merecido”, subrayó.

Con el “Ratón”, formando a los chicos en una escuela de fútbol

Hace año y medio que Diego Ciz decidió abrir una escuela de fútbol junto con otro exjugador: Raúl Román.

“Con el ‘Ratón’ nunca coincidimos en algún equipo, pero hicimos una linda amistad porque nuestros chicos van a la misma escuela. La escuelita funciona en el Complejo Laguna Grande y este año abrimos una sucursal en el complejo de la Cooperativa San Cristóbal, pero pasó esto de la pandemia y paró todo. Tenemos muchos chicos y esperemos que cuando todo esto pase podamos seguir con esta actividad”, concluyó el charrúa.