La tristeza que transmite su voz a través del teléfono es notoria. César Estigarribia (30) habla con Crónica y cuenta su padecimiento. Es uno de los miles de paraguayos varados en el exterior, desesperados por un regreso que se demora y una serie de trabas burocráticas que les impiden hacerlo. “Ya no sé qué hacer… ya no sé qué hacer”, repite una y otra vez y la incertidumbre gana terreno en la conversación.

El avance de la pandemia de coronavirus en el mundo obligó al cierre de las fronteras y desató la crisis de los ciudadanos varados en países que no eran los suyos. Historias de paraguayos en distintos puntos del planeta se contaron muchas, pero aún hay otras por contar.

Este es el caso de César, quien hace 8 meses viajó a la Argentina para hacer un trabajo en construcción. Su regreso al país estaba pactado para marzo, pero ya no pudo concretarlo. Ante el cierre de fronteras quedó varado sin posibilidad de volver a Paraguay.

“Acá no puedo hacer nada. Ya no trabajo, ya no tengo nada… Ni para comer hay. Gracias a que otros me invitan tengo algo para llevarme a la boca” cuenta César, describiendo con crudeza la verdad que hoy le toca pasar.

“Como yo, hay cientos de paraguayos. No estoy mendigando todavía por un plato de comida porque tengo la fortuna de tener a otros compatriotas que residen aquí y que me dan que comer. Los enormes corazones de unos paraguayos me están salvando en este momento”, dijo. Hace unos días la noticia informaba que varios futbolistas paraguayos que chutan en la Argentina retornaron al país, lo que hizo que César y otros más se pregunten ¿y nosotros?

“No somos futbolistas por eso no nos hacen regresar, parece. A lo mejor no somos reconocidos e importantes, pero como personas tenemos los mismos derechos. También queremos regresar, por favor, estamos pasando muy mal. Por favor que nos tengan en cuenta también”, dijo.

CALMA. César comentó que sus familiares aquí en nuestro país están muy preocupados por él. “Yo estoy bien de salud gracias a Dios y gente buena me ayuda hasta ahora. Pero mi familia en Paraguay está muy preocupada por mí”, dijo.

DIFÍCIL. La situación en la Argentina no es nada fácil porque la cuarentena se sigue extendiendo también, y eso hace que las posibilidades de conseguir algún trabajo para “chulear” la sitú se torne imposible. Hoy sobrevive gracias a los amigos.

A LA PESCA. Sabiendo de la cantidad de paraguayos que están atravesando esta difícil situación en el exterior, siempre están atentos a cuando se corre la voz de posibles viajes para repatriados a nuestro país. Esta es la única esperanza que le queda.

Las promesas del Consulado quedan en eso

Muchas veces cuando uno está en otro país, las únicas chances que tiene de volver al suyo es por medio de las autoridades nacionales que tienen oficinas en el lugar. Sin embargo, pese a la cercanía, eso no le funciona a todos ashá en la Argentina, viste.

“Hace meses que me inscribí en el Consulado paraguayo para ser repatriado, bueno me inscribí es una forma de decir porque no sé si me anotaron, pero hasta ahora no me hicieron caso. Uno llama y te desvían la llamada o simplemente no te atiende, es muy doloroso todo”, contó.

Se acabó el trabajo y empezó la agonía…

César comentó que vive en un alquiler en la zona de Retiro y que desde que todo paró, no puede pagar por la locación. “Literalmente estoy sin ningún peso”, confesó.

“Me cansé de llamar en el Consulado, pero nadie atiende las llamadas. Nos tienen tirados acá. Solo queremos una respuesta y una solución, por favor”, dijo. “Somos muchos los paraguayos que estamos sin ingreso y sin ningún peso. Por favor le pedimos al Gobierno que haga algo”, añadió.

“Somos conscientes de que si regresamos al país tenemos que cumplir con la cuarentena. En cualquier carpa voy a ir a cumplir la cuarentena como corresponde, yo no tengo problema, pero por favor que me dejen regresar al país”, he’i.

“Hace poco trabajaba y comía de mi plata tranquilamente, pero ahora ya no tengo más nada. Y estoy buscando de mil formas para volver y no estoy consiguiendo, y en el Consulado no hacen y no procuran nada. Estoy desesperado”, finalizó.