Un accidente de cocina le ocasionó quemaduras en el cuello y en el pecho al portero Éver Caballero, quien relató lo sucedido y agradeció al de arriba porque no solo se salvó él…

• Por Jorge Izquierdo

Un “accidente con suerte” es lo que muchas veces decimos cuando nos pasa algo y la cosa no sale tan fea, pero para el golero de General Díaz, Éver Caballero, el haberse salvado de milagro fue por obra del de arriba.

El arquero de 38 años sufrió quemaduras en su cuerpo, luego de tratar de preparar un asado y en charla con Crónica, señaló que “fue una quemadura de segundo grado. Ya estoy mejor, fue un susto demasiado grande. La verdad que pienso que Dios no quiso que me muera quemado. La cosa se pudo haber puesto mal. Me quemé en el cuello y en el pecho. La cosa ocurrió en un ratito, estaba poniéndole alcohol a la leña, luego se prendió y se apagó de vuelta. Luego en una de esas soplo y pasó todo lo que pasó, se cayó el aceite, etc. Fue un sarambi en un sapy’aite”.

“Puedo decir que me salvé de milagro y que mi hija también. Justo un minuto antes de que se derrame todo el aceite caliente mi hija salió del lugar en el que estaba sentada, o si no otra hubiese sido la historia. Son cosas que a veces pasan. A mí me gusta mucho la cocina y es la primera vez que me pasa algo así y no se lo deseo a nadie”, añadió el pelotero.

“Ahora Dios me dio la posibilidad de seguir mi vida, de seguir creyendo en las cosas buenas. Estaré dos semanas con el tema de la curación y esas cosas, pero desde el lunes ya podré entrenar de manera que lo venía haciendo”, remató Éver.

LO DIJO

“ESTAMOS EN TIEMPOS DIFÍCILES (CORONAVIRUS) Y HAY QUE TENER FE EN QUE PODEMOS SALIR DE ESTE MAL MOMENTO Y SER MEJORES PERSONAS DESPUÉS DE TODO”

Éver Caballero

Arquero de General Díaz

Una anécdota que nunca olvidará

De su paso por Olimpia, Éver tiene algo bien guardado que el DT ya fallecido, Luis Cubilla, le enseñó: “Me sentaba en el piso del vestuario de la Primera, tenía que respetar. Cuando eso salían los celulares y demasiado quería uno. Cobré un premio y compré, al otro día Cubilla vio el celular en mi mano y me retó, me dijo ‘nene, dejá ese aparato en la casa, si mañana venís con eso, ya no vas a entrenar acá’. Él lo decía para no desconcentrarme, que era por mi bien”, culminó.

Lo que dijo Éver sobre su posible retiro del fútbol

A la hora de hablar de fútbol y si ya le va picando el bichito del retiro, Éver confesó que “tengo muchas ganas y aún estoy en buena forma para seguir jugando. Cuando vea que los más jóvenes decidan competir de lleno en el fútbol, seguro daré un paso al costado. De momento no veo que los más jóvenes se estén esforzando demasiado. Yo tengo posibilidad de jugar todavía. Les hablo a los más jóvenes para que sea ya el momento de ellos, pero a veces se quedan en la comodidad. Hoy día tienen todo a la corta edad y eso a veces les juega en contra”, sintetizó.