El polémico panelista de TV, Fernando Ruttia, posteó increíbles imágenes del antes y después de famosas cueronas.
En el transcurso de la última semana, el Instagram estalló con fotografías insólitas de conocidas modelos, en las que se las ve cómo eran antes de que se convirt ieran en verdaderos monumentos de belleza.
Dichas imágenes pusieron con los pelos de punta a muchas de estas mujeres, por tratarse de fotografías que preferirían que no existieran.
Y el mentor de todo fue nada menos que el panelista de Lobo TV, Fernando Rutt ia, quien de venir siendo ya uno de los personajes más t iroteados de la farándula, ahora es mínimamente el más odiado, cosa que tampoco a él le afecte o le importe mucho.
En entrevista con Crónica, el mismo Ruttia se encargó de comentar sobre los increíbles cambios que sufrieron cada una de las modelos, y lo hizo a su fiel estilo “filoso” de decir las cosas.
“Sacada de la serie ‘Chespirito’, la ‘Chimoltrufia’, a ser la Novia del Mundial. Los sueños están para cumplirse y que tu cara no sea un impedimento. Pero está hermosa Lari”.
Patty “superación personal” Orué. De look canillita, de quinielera, a mujer empoderada de los medios. No hay nada que el bisturí y un poco de lectura no te pueda dar”.
“Gabi debería prenderle una vela a su cirujano. Nacer de vuelta es posible cuando te da la cuenta bancaria. Pasó de Peggy Pig de los Muppets, a una versión menonita de Claudia Schiffer. Gran logro”.
“La leche de sus vacas sí que da buen resultado. No sé si toma, se inyecta, se baña o qué hará con esa leche Laurys, pero le está funcionando de maravilla”.
“No hay mejor dieta y gimnasio que un cirujano que te re-ordene los órganos internos y la grasa del cuerpo. Y pases de ser molde vai a la ser la Barbie estríper”.
“Esto es verdaderamente inspirador y motivacional. Fabi se merece un premio por su cambio. Debería escribir un libro: “De pokyra a empresaria”, ella le dio sentido a la palabra re-inventarse”.
“Sole Cardozo se sacó la cara, tiró al basurero y se compró otra. Ella es el claro ejemplo de que cuando una quiere –y hay quien pague– nada es posible”.
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