Francisco Ocampo habló de cómo se dio la estrategia que usaba Tacuary, se acordó del traspaso de Roque al Bayern, del “Ancho” Ibarra y muchas cosas más.

• Por Jorge Izquierdo

“Estuve ligado a Tacuary casi tres décadas de mi vida”, así y en medio de una nostalgia que lo inundaba, arrancó la charla con Crónica aquel dirigente que hacía de todo por su equipo, hablamos de Francisco Ocampo, quien además de ser presidente, fue DT, ayudante, secretario, incluso hasta aguatero en el elenco de barrio Jara.

“Se extrañan esos momentos que el fútbol me regaló. Con Tacuary pasamos muchas adversidades. No fue fácil competirle a los más grandes, pero fuimos un grupo de excelentes personas que tenían hambre de sobresalir”, siguió diciendo el empresario.

Al ser consultado cómo se dio esa famosa estrategia defensiva que tenía Tacuary, don Francisco nos explicó que “ese modo de jugar lo aprendí de los galácticos del Real Madrid. Tuve pasantía por allí y Vicente del Bosque decía que necesitaba gente que se sacrifique por el equipo. Imaginate ese Real Madrid con Figo, Zidane, Roberto Carlos, etc. Todas eran estrellas y Del Bosque pidió que corran. Muchos me cuestionaron, pero el ‘Tata’ Martino entendió mi filosofía de juego. Me lo dijo en su momento, le gustó. Me dio resultados por muchos años”.

“Para tener ese tipo de estrategias necesitas hombres que sepan jugar y en Tacuary los tuve a muchos buenos jugadores. Había soldados y los generales, pero todos se sacrificaban en mi equipo. Los soldados (los que más marcaban) sabían que al tener una pelota debían de dársela a los generales (talentosos como el ‘Ancho’ Ibarra). Por algo nomas estuvimos tantos años en Primera”, puntualizó Ocampo.

ESTUDIOS

Francisco Ocampo es abogado, profesor, director técnico, además de contar con algunos postgrados y maestrías en leyes y derecho deportivo.

COMPLEJO

El empresario también tiene un complejo deportivo que está expectante para cuando se habilite el fútbol para nivel amateur.

INTERNACIONAL

Tacuary jugó las ediciones de la Copa Libertadores del 2005 y 2007, además de la Copa Sudamericana en los años 2007 y 2012.

“El ‘Ancho’ bajaba de peso y no te rendía”

Francisco también se refirió hacia uno de los jugadores más sensacionales que tuvo el fútbol paraguayo, hablamos de Emilio “Ancho” Ibarra. “Yo lo estudiaba bastante en los entrenamientos. Se paraba en una parte del campo de juego y al recibir la pelota ya sabía a dónde la iba a tirar. Era muy inteligente. Muchos hablaban de su dieta, que la Coca-Cola, que esto que aquello. Mucho de eso que se dijo no es cierto. Pero sí, el ‘Ancho’ bajaba de peso y no rendía tanto. No le podías exigir lo mismo que a los demás”, finalizó Ocampo.

¿Cómo se las arreglaba para mantener el club?

El “Tacua” estuvo 10 años en la Primera División de nuestro fútbol, luego descendió y el año pasado logró su retorno a la Intermedia, que sigue sin resolverse si se va a jugar esta temporada. “Lastimosamente se dieron circunstancias para que Tacuary descienda. Tuve dos años muy pesados cuando Recanate (Marcelo) era presidente de Olimpia.

El club lo solventábamos con la familia. Aparte de mis negocios, decidía llevar a mis jugadores al club. Perdía dinero, pero quería consolidar a Tacuary en Primera. Con la venta de algunos jugadores íbamos salvando las temporadas. Sí o sí sacábamos buenos valores. Cuando se fue Cristian Riveros, al año siguiente ya teníamos a uno similar”, redondeó.

Se encargó de la venta de Santa Cruz

Ocampo fue el representante de Roque Santa Cruz cuando iba a ser transferido al Bayern Munich de Alemania. “Fue duro negociar con Osvaldo Domínguez, cuando se jugó el Sudamericano Sub 20, Roque era el 9 de la selección. Gente del Real Madrid vino a verlo a él y se iban a acercar a hablar con Osvaldo. Yo le avisé de la propuesta.

Me sorprendió, Osvaldo sacó un comunicado avisando que no iba a recibir a gente del Real Madrid.

Con el Bayern se negoció bien, se dio y Roque se fue a triunfar. Estuve un mes con Roque en Alemania, hubo muchísima gente en su presentación, como 100 periodistas para atenderlo después”, tiró.

“Nunca me tembló el pulso ante nadie en la vida”

Francisco recuerda también algunas cañeadas constantes que tenía estando en Tacuary. “Aguantamos de todo un poco. Había gente que nos odiaba y yo me plantaba por mi equipo, por nuestros intereses.

Nunca me tembló el pulso ante nadie en la vida. Cuando jugamos la revancha de la Copa Libertadores (2005) ante el Palmeiras en el Brasil, dirigimos con Óscar Paulín. Había 40 mil personas en el estadio. Nos bombearon, le reclamé a los árbitros y como perro me echaron. Nunca me achiqué y siempre cuestioné las malas acciones”, culminó.

Algunas de las transferencias que gestionó

Francisco es muy conocido en el ámbito de representantes de jugadores, algo que lo sigue haciendo en la actualidad.

El empresario logró, entre los casos más renombrados, trasnferir a Julio González Ferreira al Vicenza de Italia, las ventas de Víctor Quintana y Carlos Humberto Paredes al Porto de Portugal.

A esto también se suma la ida de Fabián “Tyson” Caballero al Arsenal de Inglaterra y de Diego Gavilán al Newcastle del mismo país.