EE. UU. Cuando el amor todo lo puede hína péa, el novio ejemplar estuvo sentado día y noche frente a la ventana de su chúli hasta que se recuperó del covid-19. El romántico gesto fue filmado y publicó un video que tocó el corazón de miles de personas en las redes sociales. En concreto, los protagonistas de la historia de amor son Collin Ouellette, de 19 años, y Camila Baldasso, de 17.

Todo comenzó cuando los jóvenes se sometieron al test juntos tras haber estado en contacto con alguien contagiado. El test de Collin resultó negativo, pero el de Camila fue positivo. No obstante, la joven no presentó síntomas de padecer la enfermedad.

La parejita se quedó mal por la noticia. Camila dijo: “Estaba triste de que no pudiéramos vernos, pero me dijo que estaría ahí para mí todo el tiempo” y cumplió.

Desde ese momento, Collin decidió sentarse fuera de la ventana de su novia todos los días, a pesar del aislamiento pasaron tiempo juntos y no solo de manera virtual.

De día y de noche, con calor o frío, lluvia, sol y mosquitos: Collin aguantó todo para acompañar a su amada, a una distancia segura, mientras ella se recuperaba.

Oguapy frente a la ventana de Camila en su silla y pasaba al menos una hora o dos allí, a veces llevaba juegos, otras veces solo hablaban.

ÑATI’Û

Camila filmó todas las visitas y publicó un video a través de Facebook, donde llovían los comentarios. “A veces me sentía mal por él, porque estaba sentado bajo la lluvia o siendo devorado vivo por mosquitos”, he’i.