Los caserones antiguos tienen de inquilinos a unas 28 especies registradas, mucha gente les tiene terror y los mata por lo que “mbopivoluntarios” intentan salvarlos, son necesarios para el ecosistema he’i.

Si bien todos los vampiros son murciélagos, no todos los murciélagos son vampiros. Son portadores de virus siempre, pero no pasan así directamente al hombre porque la mayoría se alimenta de insectos o de frutas y no de la sangre humana como se cree por las pelis de Drácula umía.

De las más de 1.400 especies en el mundo solo tres se alimentan de sangre de otros mamíferos. En nuestro país hay 58 especies registradas, 28 de las cuales habitan las casonas de Asunción. Bien podría decirse que la capital del país se volvió toda una “baticiudad”, metáfora que sirve si nos acordamos de Batman y su origen.

La realidad es que no todos los quieren tener de vecinos, mucho menos de inquilinos y más con la pandemia se les tiene terror por todo el mambo que se generó tras la hipótesis del inicio del covid en China.

Existen estudios que encuentran una conexión, pero no está 100% comprobado, se habla de que con un huésped intermediario, los pangolines, parecidos a los tatú, se generó todo, pero no significa que ellos sean los culpables, sostiene la bióloga Gloria González de Weston.

“Somos nosotros, que vamos ocupando espacios y ellos se tienen que adaptar con lo que queda y esa cercanía hace que ciertas enfermedades pasen”, sostuvo.

Forma parte de un grupo de “mbopivoluntarios” que lleva adelante un programa de conservación de estos animalitos en nuestro país. A través de charlas intentan concienciar a la gente de que no se asusten cuando los vean y tampoco los maten.

Técnicas para el desalojo por “las buenas”

Hay un protocolo desarrollado por expertos para las zonas urbanas que ayuda a “sacarlos” de la casa usando mallas mosquiteras, cortinas o plásticos. No hay necesidad de espantarlas he’i, pero si hay problemas de heces o daño al mobiliario, se puede hacer el desalojo a “las buenas”.

Es muy raro que estos bichos ataquen a las personas ndaje, el año pasado en el campus de la UNA un estudiante encontró un murciélago malherido, le quiso dar de comer y en eso lo mordió. El mbopi falleció y dio positivo a la rabia, se aplicaron las vacunas al joven y no desarrolló la enfermedad afortunadamente.

“Son los seres más hermosos sobre la tierra”

“Enviados del mal, seres desagradables y hasta sucios” son algunos de los muchos prejuicios que existen sobre los murciélagos. Sin embargo, sobre gustos no hay nada escrito, y si le preguntás a la bióloga, te va decir que son tiernos, “los seres más hermosos que hay sobre la faz de la tierra”; es más, ella tiene ¡peluches mbopi!

Señaló que son dispersores de semillas, esto permite que germinen en lugares distantes y tengamos una renovación de bosques. “Prestan servicios al ecosistema, son los regeneradores en los bosques neotropicales que necesitamos recuperar”, indicó.