“Como devotos nos sorprendió lo que pasó con la vela, pero creemos que es por algo y nuestra fe aumentó más y más”, dijeron los fieles.

Los vecinos de doña Jovina Alonso (69) no salían de su asombro cuando la mujer, tímidamente, los llamó para mostrarles una vela que encendió en el altar de la Virgen de Caacupé que tiene en su casa. Allí estaba una figura llamativa, que los más religiosos de la zona admiten que es la mismísima Virgen María.

El “mi lagroso” suceso ocurrió en el centro de la ciudad de Ñemby, en una vivienda ubicada sobre las calles Teniente Guido casi Santa Rosa.

Quien descubrió el suceso fue la mismísima ña Jovina. “Eran las 6 de la mañana del 8 de diciembre cuando desperté y lo primero que hice –como todos los días lo hago– es encender una vela en el altar de la Virgen de Caacupé que tengo en casa. Me arrodillé y recé. Luego fui a la cocina a preparar sopa y a los 20 minutos regresé y encontré la vela derretida a la mitad y que se convirtió en la imagen de la Virgen de Caacupé”, contó a Crónica muy emocionada.

La not icia corrió rápidamente en el barrio y al toque algunas personas –respetando el protocolo sanitario– llegaron hasta el lugar para presenciar lo que ellos consideran “una manifestación de la Virgen”.

Es más, la cosa no quedó solo ahí. Los dueños de casa y los lugareños, asombrados ¡le rezan a la vela y le piden milagros!

“La vela quedó en el altar de la Virgen, se quedó con esa figura. Le rezamos a la vela porque sabemos que la Virgen se manifestó allí y puede hacer muchos milagros, la Virgen puede hacer muchas cosas, solo hay que creer. Es por eso que rezamos el rosario en ese lugar ”, agregó ña Jovina. “Como devotos nos sorprendió lo que pasó con la vela, pero creemos que es por algo y nuestra fe aumentó más y más”, finalizó.

ASOMBRO

“Cuando vi la vela de esa forma no salí de mi asombro. Luego comprendí que es algo maravilloso. Mi familia y vecinos también fueron testigos”, dijo ña Jovina.

REZAN

“Todos los días rezamos y nos encomendamos en ese lugar. Rezamos a la vela porque sabemos que la Virgen se manifestó allí. Es nuestra fe y lo creemos”, contó.

PROTEGIDOS

“Con lo que sucede nos sentimos protegidos por la Virgen. Somos muy devotos y esto nos fortalece. Esto es un mensaje de ella para nosotros”, añadió.

Gruta especial para la Virgen y la vela, contó

“La idea es hacerle una gruta a esta imagen y que la vela esté ahí siempre. Yo no voy a tocar eso para que la gente pueda ver cuando venga”, contó ña Jovina, quien agregó que ella es testigo de cómo la Virgen obró en su vida.

“Antes de tener esta imagen de la Virgen yo tenía presión alta, taquicardia, problemas respiratorios, alergia y yo me encomendé a la Virgen. Este año solo un resfrío tuve. Es gracias a ella que me protege y guía”, finalizó.

“No tenemos duda de que es una señal”

“Primeramente me asusté al ver la manifestación de la Virgen, luego sentí una paz en mi corazón”, contó ña Jovina. “Para mí y para muchos no quedan dudas que es una señal que la Madre de Dios nos está enviando”, agregó.

“Creemos que es una señal para decirnos que ella igual va a estar con nosotros pese a que le recemos en nuestras casas por esta pandemia y que los que no creen en ella ahora lo puedan hacer.

Algunos también me dicen que es porque está triste por el hecho de que la Basílica estuvo vacía en su día, como que quieren que se termine la tradición que llevamos y eso a lo mejor no le gustó a la Virgen. Por eso aparece así”, sostuvo.

“Es una señal que se están haciendo cosas que no le gusta a ella, pero nos quiere decir que siempre va a estar con los que la quieren”, finalizó.