Florencio Vargas, director operativo de la institución, aseguró que hay menos movimiento en las calles.

Los controles en las calles se vuelven cada vez más fuertes para evitar no solo la propagación del maldito virus sino también de cualquier situación que pueda terminar en una tragedia. Al menos ese es el trabajo principal de los efectivos de la Patrulla Caminera, quienes refuerzan los vicheos y la caza de los ka’úcho que van en el volante.

En ese sentido, el director ejecutivo de la Patrulla Caminera, Florencio Vargas, dijo que por el contrario de los hospitales, en las calles se vuelve a sentir un poco de respiro, ya que al parecer los conductores pillan que la sitú no es una joda. “Parece que están viendo todo lo que está pasando en el país. Sentimos menos movimientos en las calles, al menos este fin de semana fue menos que el pasado. Ver lo que hay en los hospitales les hace entender que esta enfermedad es muy peligrosa y prefieren quedarse en casa”, relató a Crónica el capo.

Aseguró que pese a que hay controles a full, están haciendo vista gorda a las infracciones menos importantes, pero agregó que los que no se salvan son los ka’úcho. “Nos exponen a cualquier tipo de situación, no solo con el covid, sino también con los accidentes.

Por eso estamos aumentando también los horarios de controles, no vamos a tener consideración con ellos”, tiró el capo. Mencionó que están laburando con todos los protocolos de seguridad para evitar que los efectivos también se contagien por culpa de los farristas.

375 PERSONAS

El director mencionó que este fin de semana unas 375 personas dieron positivo al ka’utest y uno de ellos arrojó un resultado muy alto. “La mayoría da positivo por tomar dos o tres latitas”, le bajó.

Peleas con los “zorros”: piden diálogo para que “reine la paz”

Vargas explicó que en los últimos días tuvieron varios inconvenientes con los automovilistas, ya que todo el mundo anda con los nervios de punta.

Explicó que tratan de solucionar los problemas sin llegar a los conflictos judiciales, ya que buscan que reine la paz en las calles por la crisis sanitaria y económica.

“En estos momentos no queremos generar más problemas a la gente, por eso siempre tratamos de solucionar los problemas hablando, es una cuestión de profesionalismo”, detalló el capo.