Por señas ella se comunicaba con Miguelito, de 4 años, a través de la ventana de la pieza donde estaba aislada. Pero superó la batalla y el reencuentro fue muy emotivo.

Las lágrimas brotaron. El corazón se abrió para abrazarlo en un instante único y eterno. Mahia Flores volvía abrazar a su hijo después de permanecer dos semanas aislada debido a que dio positivo por covid-19.

Las redes sociales fueron testigos de ese momento por medio de un video en el que las emociones estrujan el corazón al ver a Miguelito, de apenas 4 añitos, llorando de emoción al reencontrarse con su mamá, el pasado 25 de marzo.

“Mami, ¿ya no tenés el virus?, ¿podemos abrazarnos?”, le dijo el pequeño cuando vio a su mamá sentarse en una silla frente a su casa, tras salir de aislamiento. Miguelito no aguantó las ganas y con todas sus fuerzas abrazó a su madre, a quien solo le veía desde una ventana durante todo el tiempo que duró el distanciamiento. “Quiero dormir más mucho tiempo contigo, a tu lado”, expresó Miguelito mientras mojaba el momento de lágrimas.

Mahia vive en el barrio Laurelty, de la ciudad de San Lorenzo y con mucha emoción contó su experiencia. “Hablábamos a través de la ventana. Apenas se levantaba y ya me buscaba. Todos los días me preguntaba cuándo me iba a poder abrazar”, contó la emocionada mamá. Orgullosa de su peque, dice que Miguelito siempre fue muy capo, ya que maneja cualquier situación que se le atraviesa.

“Yo no escucho, soy sorda y hablo muy poco. Pero Miguelito me entiende, él habla bien y hace señas también. Su papá no escucha ni habla, pero con Miguelito se entienden superbién”, contó la orgullosa mamá. Explicó que todos esos detalles son los que todos los días le llenan de fuerza y felicidad ya que puede disfrutar de tener la dicha de contar con un compañerito como él.

LAS CLASES

El peque ya comenzó el jardín de manera virtual y le encanta hacer sus tareas. Juega partido con su abuelo y amiguitos y tiene un gran amor por los animales, en especial por su perro “Toti”.

Se hablan por medio de las señas

Mahia aseguró que no esperó menos de su guerrero hijo, quien a la par de su mami se mantuvo también firme.

Ellos llevan una relación súper fuerte y acostumbrada a superar barreras. Miguelito se comunica con sus padres a través de señas y se comprenden muy bien, llevando una vida feliz, según contó Mahia.

Pese a que los días fueron muy difíciles, a su corta edad el peque pudo entender las condiciones que ponía a su vida este virus que le alejó por un tiempo de su mamá. El video del reencuentro recorrió todas las redes sociales. Hasta Mahia y sus familiares quedaron sorprendidos con toda la repercusión.

Miguelito es un luchador desde bebe’i, dijeron papis

Los ojos de Mahia, se encienden cuando le preguntan por él. Ella describe a su hijo como un pequeño muy valiente, juguetón y risueño, quien le sonríe a la vida pese a todos los desafíos que estén viviendo.

Miguelito es único hijo, y por eso siempre fue muy apegado a su mami. “Él nació prematuro y estuvo internado un tiempo. Es muy apegado a mí, es el niño que defiende a su mamá en todo momento”, contó Mahia.

La mujer contó que los tropiezos que tuvieron en la vida le ayudaron a reforzar el amor que ya se tienen y agregó que eso les volvió invencibles ante la lucha que enfrentaron hace días con el maldito virus.