DE CIUDAD DEL ESTE. Gerard dejó su natal Ciudad del Este cuando tenía 20 años en busca de sus sueños. Se instaló en España, allí decidió tomar como estilo de vida viajar por el mundo. Con trabajos en la construcción cubría sus gastos. Ahora, con la pandemia, ya recorrió Paraguay de punta a punta, en moto. Nos cuenta sobre su presente y lo que espera hacer apenas pueda viajar de nuevo.

Con mochila al hombro y su infaltable bandera paraguaya, Gerard (Gerardo Franco) recorrió gran parte del mundo, hasta fines de febrero del año pasado. Su idea era seguir, pero la pandemia le puso freno y, menos mal, estando en su país. Pero no hay mal que por bien no venga. Esta situación le hizo conocer de punta a punta Paraguay, una tierra que dejó muy joven, prácticamente sin haberla conocido.

– Esta pandemia cortó tus viajes por el mundo, ¿dónde estabas cuando decidiste regresar al país?

– Le puso una pausa a este capítulo de mi sueño, cambió todas mis ideas como las de todas las personas del mundo, imagino. Así que no puedo ser tan egoísta y solo quejarme, hay gente a la que afecta mucho más esta situación. Realmente no regresé al país por la pandemia, estaba en Malasia sin saber qué rumbo tomar, era el Pacífico Sur, incluyendo Australia o venir a terminar de visitar America Latina y el Caribe. Unos amigos me invitaron a juntarme en Florianópolis, no dudé mucho y crucé todo el globo prácticamente para ello. Después de hacer una breve parada de dos o 3 semanas en Paraguay para ver a mi mamá, que venía de recuperarse de una influenza que casi le lleva. El 18 de marzo del 2020 era mi idea continuar con mi aventura, pero el 11 empezó la cuarentena, el 15 cerraron la frontera y el 18, ¡cuarentena total! ¡Así que acá vamos, sin perder el entusiasmo!

– ¿Que hiciste durante este año encerrado en tu país?

– Realmente qué no hice jaja… Lo más difícil fue la cuarentena total de casi 3 meses, pero nada es tan malo como parece. Si uno sabe aprovechar el tiempo puede usarlo para estar consigo mismo, reflexionar, ver por qué no le está yendo bien, qué debe mejorar, un montón de cosas personales. Durante la segunda fase conocí a un alemán que quedó atrapado aquí y no pudo seguir con su viaje, me encendió la lamparita, compró una moto e iba a hacer un recorrido por Paraguay con ella. Yo quería comprar una bicicleta y hacer lo mismo, pero al ir a una tienda a preguntar lo que costaba una más o menos, me dicen 2.800.000 guaraníes. ¡Casi me da un paro!

Tenía pensando pagar como 600 mil, el alemán tenía que marcharse y ponía su moto en venta por 2 millones 800 mil, más barato que una bici. A la larga, la bici, claro que salía más económica, pero el problema era que no sabía andar en moto con marchas. Pero como el alemán lo aprendió acá, ¡¿por qué yo no podría hacerlo también?! ¡Y compré la moto! ¡Ahí empezaron otras ideas! Jaja…

– ¿Descubriste muchas cosas desconocidas dentro del país?

– Yo me fui con 20 años de Paraguay en busca de oportunidades y buscando mi independencia, ¡o sea, no quería depender de mi mamá después de que mi papá falleciera! Prácticamente desconocía mi país, era una espinita que tenía, así que aprendí a usar moto y me fui al descubrimiento. Visité tantos lugares naturales e increíbles por el mundo, pero vine a llenarme de sorpresas, con todo el potencial natural que tenemos acá, pantanal, cerros, saltos, sentir que estás en una selva tropical de América Central (región Oriental) y, de repente, pasar a una sábana africana (Chaco). No sé si la moto le dio un toque especial, pero te puedo asegurar que, sacando el mar, no tenemos nada que envidiar al mundo.

– ¿Qué fue lo que más te sorprendió?

– Isla Pombéro, ¡llena de misterios! Las dunas de San Cosme y Damián se parecen a alguna playa del sudeste asiático, ¡y puedo nombrarte muchísimos más! Paraguay es increíble, ¡cuidémoslo!

– Sabemos que vos viajabas recorriendo países y después te volvías a España para trabajar y hacer dinero para tus próximos destinos, ¿cómo te solventás ahora?

– Así es, pero esta vez antes de irme de España tenía una cantidad x ahorrada y no iba a volver hasta que se me acaben los ahorros, ya que siempre podía ganar dinero, pero tiempo no iba a poder comprar. Había invertido parte de mi dinero en construir alguna vivienda y lo alquilo mientras no vivo allí, no es una fortuna, pero me sirve para mantenerme de momento sin tocar mi ahorro. Aquí en el país tengo un capital para mi viaje y eso lo reinvertí este año. Sabés que en Ciudad del Este el compra-venta es el negocio más rentable, ¡solo necesitás hablar con las personas indicadas! No soy una persona que malgasta, la educación financiera es muy importante para un proyecto o una meta.

– ¿Dónde vas a ir cuando puedas viajar de nuevo?

– Está algo complicado, ya que yo me banco mis viajes y no quiero empezar y tener que volver por restricciones o gastos excesivos con tests o burocracias. Pero una cosa, sí haré un buen camino en moto, ¡quién sabe… los siguientes 79 países que me faltan por visitar! De momento apunto a las Guyanas cuando las cosas mejoren.

– ¿Cuantos países ya recorriste?

– Países oficiales 118, más 4 que no son reconocidos por la ONU y varios estados como Macau, Hong Kong y algunos más.

– ¿Cuáles son los siguientes 10 países que están en tu hoja de ruta?

– Mi idea era hacer French Guiana (Guyana Francesa), Surinam, Guyanas Venezuela, Trinidad y Tobago, Grenada, San Vicente y las Granadinas, Barbados, Santa Lucía, Dominica, Guadalupe y las demás islas, pero en junio empieza la temporada de huracanes y no sé si me dará tiempo en hacerlo. De otra, haré África de nuevo, ya que me quedan 38 países allí. No tengo un plan fijo, che ahánte y sobre la marcha voy viendo qué conviene más.

– ¿Es un estilo de vida para vos esto de viajar por el mundo, te estresa no poder viajar?

– Eso mismo, es un estilo de vida, para mí es como ir a la universidad. Cada persona es una nueva lección de vida, sobre todo. A veces te venís abajo cuando escuchás historias que te dan ganas de preguntarle, ¿y seguís con ganas de luchar? Te das cuenta de que nunca fue un problema lo que tenía, solo que nos ahogamos en un vaso de agua, porque vamos demasiado rápido sin importar a quién hacemos daño directa o indirectamente. El mundo está lleno de aprendizajes, vivencias, aventuras, conocimientos, informaciones… ¡Te transforma! Como dice una frase que me gusta mucho, “si cada día no aprendés algo nuevo, ese es un día perdido”, y yo, particularmente, aprendo muchísimo viajando; y sí, me estreso al no poder seguir con este proceso de conocimiento que se llama vida, para luego venir y compartirlo con los demás en primera persona. Muchas veces lloré solo de emociones, ¡estoy tan agradecido con la vida por mostrarme el camino, a base de golpes, pero era mi camino.

– ¿Que vas a hacer el día que ya no te queden países por recorrer?

– Me gustaría venir con mis proyectos a Paraguay y trabajar con los más pequeños y jóvenes para que de grandes sean fieles a sus sueños y no se corrompan por las superficialidades de la sociedad actual. Me gustaría intentar crear personas que luchen por un Paraguay y un mundo mejor. Yo no quiero plata, yo solo quiero ser feliz y ver personas felices. ¡Y demostrar que un paraguayo es parte de este mundo y que también podemos! ¡Gracias por el interés hacia este viajero de la vida! Paraguayito múndore!

“ASALTADO”

“Durante el encierro también fui asaltado prácticamente en una barrera policial fiscal en Ciudad del Este, mientras repartía víveres para ollas populares”, comentó Gerard. “La fiscala Susan Vega, junto a su asistente y más 4 policías de la comisaría segunda, Ciudad Nueva. Hay una denuncia contra ellos en la Fiscalía de CDE hecha por mí”, comentó el paraguayo que ya recorrió 118 países y otros tantos tantos no reconocidos.

Fotos: Instagram @gerard_conmochila