La pequeña J. M. tenía días de haber nacido. Lucía un hule como pañal y una bata médica. Estaba en los brazos de su abuelo en el pabellón de contingencia del Hospital Regional de Ciudad del Este. Allí, Fátima (16), madre de la pequeña, luchaba para vencer al covid. La familia es de escasos recursos y el abuelo estaba muy preocupado sin saber qué hacer.

Un joven, de nombre Nelson Lisboa, quien tiene también a su papá internado en el hospital, vio cómo se encontraba la pequeñita y sintió en su corazón que algo debía hacer. Avisó a sus primas Cynthia y Viviana Lisboa. Las dos se acercaron al abuelo de la bebé y se ofrecieron para  hacerse cargo de la pequeñita hasta que la madre logre recuperarse completamente. “Le dimos amor y lo hicimos de corazón. Con mi hermana Viviana la llevamos a casa y nos llenó de felicidad. Hicimos de ‘familia canguro’. Le hicimos todos los estudios que nos pidió la pediatra y salió todo bien”, contó a Crónica Cynhia

“Si la madre lo permite, queremos seguir estando en la vida de la bebé y brindarle nuestro amor. Lo que hicimos, lo hicimos de corazón. Ya la adoptamos como nuestra ahijada”, dijo Cynthia.

Fátima vive con su papá en el asentamiento San Marcos, ubicado en el kilómetro 30 de Minga Guazú. Pero por estos días tanto ella como su bebé se quedarán en la casa de los Lisboa. “Nuestra bebé ya está acunada en los brazos de su mamá adolescente repleta de amor, pero con innumerables necesidades dentro de su hogar, son muy humildes y necesitan ayuda”, dijo Cynthia. “Nos gustaría contar con la ayuda de las personas de buen corazón en lo que puedan por lo menos para que no pasen frío en su casa. Buscamos frazadas, colchón, sábanas y en lo que puedan para que nos ayuden a construirle un baño digno para que puedan tener agua calentita en la casa”, contó Cynthia.

“Dios siempre obrará en milagros. Nos envió a esta hermosa bebé para que le dé algo de sentido a nuestras vidas. Hace tres meses que mataron a mi papá, y con la llegada de esta hermosura sentimos paz. Estamos felices con ella y que esté sanita al igual que su mamá”, contó Cynthia. “Quiero agradecer a todos los que nos ayudan. A mis tíos, primos, a todos los que están ahí para cuidar de esta beba hermosa”, agregó.

Hoy, Fátima le ganó la batalla al virus y ya pudo abrazar a su beba. En medio de mucha emoción agradeció de una manera especial a la familia que acogió a su pequeñita. “Ellos son los ángeles que salvaron a mi bebé. Si no aparecían no sé qué pudo haber pasado con mi bebita. Le dieron ese abrazo de salvación”, contó Fátima. “Que personas hagan esto por alguien que ni conocen nos da la señal que no todo está perdido. Serán las madrinas de mi hijita. Son héroes anónimos en esta pandemia”, finalizó.

AYUDA “Sabemos que son una familia humilde y que necesitan de ayuda”, dijo Cynthia. Si querés colaborar en esta noble causa podés comunicarte al 0973 575 273