Alejandro Da Silva, hoy entrenador, recordó su paso por Newell’s de Rosario, donde tuvo que lidiar todo tipo de situaciones.

• Por Arturo Rojas C.

Hablar de Alejandro Da Silva (39) es hablar de goles, pero no cualquier gol, sino uno con calidad, con ese toque distinto. Ese talento lo llevó a jugar en varias partes del planeta y le tocó en una ciudad muy futbolera, como es Rosario.

En esta entrevista con Crónica, Ale se animó a decir que “el clásico de Rosario es más que un Boca-River para mí, antes que llegue ahí ya me comentaron de ese partido, pero al vivirlo es otra cosa”, dijo el hoy día entrenador.

Pero más allá de esa adrenalina única, a Da Silva también le tocó bailar con la más fea. “Uno de los momentos más complicados que pasé ahí fue cuando peleamos el descenso, pasó de todo, recibimos amenaza con mi familia, nos llamaban a la casa donde estábamos y nos decían de todo, era más que jugar solo a la pelota, fue mucha presión, pero por suerte pudimos salir adelante y nos salvamos de descender con un gran equipo humano que tuvimos”, recordó Da Silva.

El lado positivo de la pasión por el juego también tenía su lado negativo, el de los inadaptados que no representan a los hinchas de ese popular equipo argentino y que creen que con violencia se soluciona todo.

“Hice goles claves en esa temporada que nos salvamos, en general fue una linda experiencia haber jugado allí, mucha locura en todo sentido, y una ciudad con gente muy pasional por su equipo”, cerró Ale, repasando uno de los tantos episodios no tan futboleros que le tocó vivir en su reconocida carrera.

Una pasión linda, pero muy inestable, aseguró

Para Alejandro Da Silva la pasión por el deporte rey siempre está. “Es difícil alejarse del todo de un campo de juego, siempre está la pasión por el fútbol y ahora me toca ejercer como entrenador, que no es una profesión fácil en el mundo en general y en especial acá”, dijo el profe, que últimamente estuvo en Rubio Ñu como adiestrador.

El profe Ale sabe que mandan los resultados para un DT, pero en su forma de pensar se debe analizar más que eso. “Sabemos que eso manda, dos o tres semanas no te va bien y chau, así es lastimosamente, creo que se debe evaluar más los trabajos que un entrenador hace, es un poco inestable ser DT en un ambiente que cambia mucho”, agregó el ex Cerro Porteño.

“Haber jugado en Italia me enseñó mucho”

Muy joven, aquel delantero Alejandro Da Silva daba su salto a Europa, más bien al Udinese de Italia desde Cerro Porteño. “Haber jugado en Italia me enseñó mucho, porque es totalmente otro mundo en muchas cosas, el saber jugar, lo táctico es otra cosa comparado a lo que en ese entonces yo jugaba, me fui muy joven, me costó pero me tocó sacar muchas cosas positivas de eso”, dijo Ale, que se mantuvo por cuatro años en el fútbol de ese país.