Elizabeth Encina, la cuerona paraguaya que aparece en un portal de acompañantes en México contó que viajó engañada. Denunció trata de blanca y relató lo peor que vivió con otras cueronas que no sabían que iban para “eso”.

Revuelo causó ayer nuestra publicación sobre las modelos paraguayas que aparecían en un portal donde ofrecían damas de compañía en México. Las fotos de las cueronas semiopívo dejando sus datos y número de contactos generó todo tipos de comentarios. Pero detrás de esto surgió una denuncia grave hecha por una de las cueronas que está en México.

“Sé que muchas veces hacen eso de robar fotos de algunas chicas y subir en páginas así, pero no fue ese mi caso. Yo voy a contar todo lo que pasó y cómo fui engañada hasta llegar ahí”, nos dice de entrada Elizabeth Encina, una de las compatriotas que aparecen en el portal laboutique.vip bajo el nombre de “Aitana Pons”.

“No pensé que iba a pasar tan mal por eso quiero contar para denunciar y que a nadie más le pase. Yo contacté con L.A., una paraguaya que tiene una agencia. Ella me contactó para que venga acá (a México) para trabajar como dama de compañía. Hacer una sesión de fotos y promociones. Yo solamente tenía que pagar el costo del vuelo. Pero era todo mentira”, señaló Eli.

La cuerona asegura que sus problemas empezaron ni bien pisó el suelo charro. “De entrada luego ya me hicieron demasiados problemas en Migraciones. Estuve retenida ahí varias horas y la encargada, de dónde. Después de ese problema siguió lo peor. Me pusieron una deuda de 100 mil pesos mexicanos, que vendrían a ser cinco mil dólares que yo debía pagar”, relata Elizabeth.

La exmodelo quedó en shock porque hasta donde ella sabía, solo debía pagar el pasaje que costaba 800 de los verdes. “Me hicieron pagar el trámite de Migraciones que era 1.300 dólares, los pasajes, la sesión de fotos que eran más de 1.000 dólares y también las publicaciones en los portales. Me hicieron comprar toda la lencería. Y ya ni modo, ya estaba acá. No iba a dejar todo e irme otra vez. Pero así me estafaron”, dijo Eli.

Todo empeoró para la cuerona. Cuando realizó su sesión de fotos se enteró que no solo sería dama de compañía, sino también debía hacer el “ya tú sabes”.

“Cuando llegas a la casa y haces la sesión de fotos te enseñan todas las cosas. Y ahí ya te das cuenta a dónde va el tema. Muchas saben a qué vienen, pero otras vienen totalmente engañadas. Sobre todas las que cumplen apenas 18 años. Venían totalmente engañadas supuestamente para hacer promoción o modelaje”, comentó Elizabeth.

Pagó deudas y se rajó

Otra de las mentiras que ventiló Elizabeth es con referencia al portal que publicita sus servicios.

“Ya acá tuvimos que subir a la página las fotos. La página dice que sos independiente y es mentira, venís por agencia. Un tormento es. Hay chicas que se llegaron a escapar de todo esto, pero yo no me escapé, pagué mis deudas y me fui a Paraguay por mi cuenta. Aguanté tres meses así.

“Solamente conoces los moteles”

“No es joda acá. L.A. te metía un miedo para salir. Vos no podés salir de la casa. Solamente salís para trabajar acá. Solamente conoces los moteles. Liz no te deja dormir. Hasta las 5 de la mañana te obliga a estar despierta por si un cliente llama. Te hace maltrato psicológico constantemente. Te trata de gorda, de fea, miles de cosas. En dos ocasiones intentó pegarme. Una vez a una chica le pegó con la culata de una pistola”, relató Elizabeth.

“Si era para facturar, me quedaba en Paraguay”

La cuerona que destapó la olla dijo que aguantaba todo por necesidad.

“Estaba en pandemia. Mi mamá tiene cáncer, yo tengo cáncer. Vine por necesidad. En ningún momento me dijeron que era para facturar, si era para facturar me quedaba en Paraguay a hacer lo mismo y más tranquila”, le bajó Elizabeth y agregó: “Mi mamá sabe qué hago, pero el resto de mi familia no”.

Drogas y payé

“L.A. no nos sacaba a ningún lado. Nos tenía siempre en la casa. Lo máximo que íbamos era al mercado porque es payesera y tenía que comprar velas a sus santos.

Lo que esta mujer ganaba, gastaba todo en taiboleros o taxi boy como se les conoce.

También en sus drogas. A cada rato quería que jalemos (inhalar cocaína) con ella. Dormíamos dos chicas en una cama de una plaza como chanchitos. Solo salís para ir al motel”, relató Eli.

Llevaron a una virgen

“Hay una chica que llegó virgen y acá se enteró que tenía que acostarse con tipos. Se quiso matar la chica. La mayoría viene engañada. Aguantan cinco meses y se van. Las amenazas que reciben de L.A. es constante. Ella ya tiene denuncia por trata de persona en Paraguay, pero nadie hace nada contra ella”, remató Elizabeth Encina.

Volvió por necesidad

Ayer, a la mamá de una de las chicas le dio un infarto por culpa de todo esto. Todos hablan, todos publican, pero muchos no se dan cuenta de que hay familias detrás de todo esto. Yo volví a México ya con otra agencia y no me puedo quejar ahora. Vine por mi consentimiento y por necesidad de ayudarle a mi familia. Como te digo, mi mamá tiene cáncer y eso acarrea muchos gastos”, relató avei la cuerona.