El 21 de julio del 2010 era un día más de trabajo para el personal de Servicio Urbano de la Municipalidad de Asunción. Los recolectores de residuos realizaban su tarea de forma normal con el ajetreo al que ya están acostumbrados.

La avenida Primer Presidente se encontraba en la ruta de ese día. Richard Jara iba en la parte superior del camión recolector haciendo el espacio para que más basura pudiera entrar.

Su trabajo era recibir las bolsas, abrirlas e ir aplastando los residuos, de manera a hacer más espacio.

Una bolsa en particular le llamó la atención y empezó a romperla. Su sorpresa y el susto que se dio cuando la abrió fueron tremendos. Encontró el cuerpecito de una inocente criatura. Ayer se cumplieron 11 años.

“Salimos a trabajar y sobre Primer Presidente, frente a un condominio, nos acercamos, yo estaba arriba, con un compañero, Merardo Almada, y empezaron los que estaban abajo a tirar la basura, nosotros a abrir y a aplastar y ahí le encontré a la beba”, contó el recolector.

La pequeña fue bautizada como María Milagros Soledad y fue enterrada en la entrada de la Dirección de Servicio Urbano. Desde ese entonces los funcionarios de esa dependencia le festejan su cumpleaños al ángel de la guarda que los acompaña siempre, según contaron.