“Lo perdí todo”, dijo a Crónica uno de los afectados, quien atribuye el milagro de estar vivo a la santa del Bañado Sur.

A don Ismael Cáceres lo alertó su hermano, a los gritos y empujándole. “Algo se está prendiendo fuego”, le repetía. Alrededor, el aire empezaba a volverse negro.

Aún en el asombro y descalzo, don Ismael salió corriendo al patio. Ahí vivió algo de lo que mucha gente describe que sería igual al infierno.

El fuego llegó a su casa. Don Ismael dejaba atrás su ropa, su motocicleta, su cocina, su casa… La estructura de madera y chapa quedó carbonizada. Como él -y su gente- hay otras 10 familias en el barrio Santa Ana del Bañado Sur de Asunción, quienes lo perdieron prácticamente todo luego del voraz incendio que se desató ayer y que fue controlado gracias a un intenso laburo de los bomberos voluntarios y los vecinos que, con baldes repletos de agua, ayudaban a apagar el fuego.

“Lo perdí todo. Ver cómo mi casa se convertía en cenizas fue muy fuerte y estoy destrozado”, dijo a Crónica don Ismael, en medio del dolor que no comprende. “El barrio fue un verdadero infierno, fue algo terrible, el fuego alrededor nuestro y nosotros sin saber qué hacer”, agregó.

Según datos de los intervinientes, el incendio inició en las calles 44.ª Proyectada y Antequera y el motivo fue por la quema de basuras en el lugar. Por el fuerte viento rápidamente se propagó a otros sectores. Algunos de los vecinos pudieron sacar ciertas pertenencias para evitar que sean afectadas. “El incendio comenzó en la zona de Villa Bartolo y vino hasta acá, al otro lado del Bañado (Sur)”, contó doña Blásida Gavilán.

“Estamos vivos gracias a los bomberos y los vecinos que ayudaron a controlar el fuego”, finalizó.

Le atribuye el milagro a la santa

Don Ismael recordó que el pasado 27 de julio fue el día de Santa Ana y en aquella ocasión le pidieron a la patrona del barrio que les protegiera de todo mal. Es por eso que el karai le atribuye el milagro de estar vivos a la santa.

“Fue un milagro que no haya habido ningún muerto. Todo esto fue gracias a Santa Ana, quien nos protegió de todo lo terrible que pasó”, dijo el don.

“Claro que Santa Ana nos protegió del fuego y nos salvó. Perdimos todas las cosas, pero salvamos nuestras vidas”, añadió.

“El Bañado se convirtió en un infierno en un sapya’ite. Ver que todo nuestro sacrificio se destruía nos dolió mucho”, finalizó.

Desde la SEN dan ayuda a las familias afectadas

El ministro de la Secretaría de Emergencia Nacional, Joaquín Roa, comentó que la institución asiste a unas 10 familias afectadas, a pedido del presidente de la República, Mario Abdo Benítez.

Dijo que están preocupados desde semanas atrás porque las condiciones son muy favorables para los incendios en este momento.

“Falta que alguien prenda un cigarrillo, tire una botella, una basura en un lugar inadecuado, el reflejo del sol y tenemos un incendio que puede tomar una gran extensión de tierra”, manifestó.

En ese sentido, resaltó la importancia de la conciencia ciudadana para evitar los incendios forestales.