La mamá de la pequeña contó que dio a luz a los 42 años, luego de un embarazo muy complicado, gracias a María Felicia.

Eran las 5 de la mañana de ayer y el frío viento que soplaba en las afueras del aeropuerto “Silvio Pettirossi” estuvo acompañado de gotas, pero no de lluvia, sino de lágrimas que rodaban en los rostros de cientos de devotos que “madrugaron” movidos en la fe para recibir las dos urnas que traían las reliquias de María Felicia de Jesús Sacramentado, la querida “Chiquitunga”.

Todos los devotos presentes tenían una historia para contar. Sería imposible escucharlos uno a uno, aunque algunos relucían a la distancia. Es el caso de doña Marcia Martínez (44) y su pequeña hija María Jazmín, de tan solo un año y ocho meses. La niña llamaba la atención por su vestimenta. Llevaba túnica color castaño y una capa blanca, símbolo de la Virgen María, tal como se visten las hermanas Carmelitas y como lo hacía “Chiquitunga”. “Mi hija es un milagro de la beata. Yo le tuve a los 42 años, contra todo pronóstico y tras un embarazo complicadísimo”, dijo a Crónica doña Marcia.

“Durante el embarazo, yo tuve la presión altísima, hasta las nubes, estuve en cama tres meses y tomaba muchos remedios. En ese momento me encomendé a ‘Chiquitunga’ por mi hija y le pedí que nazca sana y salva, y aquí está ahora conmigo, dando gracias por eso”, agregó la doña que emocionada participó de la ceremonia de recepción de las reliquias de la beata ayer.

“Le pusimos María Jazmín justamente por eso, en honor a nuestra beata y próxima santa”, añadió. “Mi hija tiene un cuadro de ‘Chiquitunga’ en su pieza y la reconoce. Sabe que es nuestra protectora. A ella se lo debemos todo”, finalizó.

Caso de José Zaván podría ser milagro

El obispo Edmundo Valenzuela, arzobispo de Asunción, recordó al joven José Daniel Zaván, único sobreviviente del accidente aéreo ocurrido en febrero de este año, y mencionó que el caso podría ser un milagro atribuido a la beata María Felicia de Jesús Sacramentado, más conocida como “Chiquitunga”.

En ese sentido, señaló que solo falta un milagro más para que “Chiquitunga” sea considerada santa.

“A José Zaván su madre lo encomendó bajo la protección de ‘Chiquitunga’”, dijo. Al respecto, Blanca Vaccari, madre de José, se mostró emocionada al saber que el caso de su hijo podría ser el que finalmente permita que “Chiquitunga” se convierta en la primera santa paraguaya.

FOTO IMÁGENES DE FE