El hoy tatuador y a la vez pelotero del Kelito habló en exclusiva con Crónica dejando grandes vivencias y anécdotas.

• Por Ricardo Núñez

“En mi ley está el no rendirse jamás”, ese es el lema de Carlos Rodríguez, conocido popularmente como el “Pitito” Rodríguez. El roquealonseño es un fiel amante del fútbol y a sus 30 años busca sacarse la espinita que tiene desde que era pequeñito: debutar en Primera División. Ahora se encuentra en la reserva de River Plate.

“Trato de acomodar mi tiempo. Obviamente, respetando más las horas de entrenamiento y en el tiempo que me sobra me pongo a tatuar. Lo bueno es que la gente ya conoce mi trabajo. Entonces, no tienen problemas si es que de por ahí le voy cambiando los horarios de atención.

Así sostengo mi trabajo, sin descuidarlo, y también hago lo que me gusta, que es jugar al fútbol”, he’i Rodríguez.

Asimismo, “Pitito” recordó que trabaja por sus sueños de llegar a debutar profesionalmente desde los 12 años.

“Por cosas de la vida aún no se pudo dar. Y bueno, por la edad que iba teniendo también tuve que ir buscando otros medios para trabajar y poder sostenerme económicamente. Por casos extrafutbolísticos que pasé con algunas personas tuve que desistir de mis sueños, sabemos que el fútbol también es un pequeño negocio. Yo quedé asqueado, por eso decidí abonarlo”, le bajó.

Luego de lo que significó la gran decepción para Rodríguez, el ir en busca de sus sueños y toparse con varios obstáculos extrafutbolísticos, allí decide dedicarse a tatuar a personas y, según él, ya lleva 5 años en el rubro. Pasó bastante tiempo y el “Pitito”, una vez más, lo volvería a intentar.

Carlos volvió a las canchas solo este año

Pasaron cinco años donde era casi un hecho que Carlos Rodríguez iba a tirar la toalla en el fútbol, pero… “Decidí volver este año. Primero fui al futsal del conjunto de Villa Hayes donde fuimos campeones nacionales.

De allí pasé a Deportivo Capiatá para hacer una pequeña preparación y después ya se me pudo dar el gran salto a River Plate”, agregó el volante por derecha.

Aguarda el llamado de “Chito” para poder cumplir su sueño

De hecho, Rodríguez ya jugó varios partidos con el plantel de reserva del Kelito e incluso ya fue convocado con el plantel principal, pero falta el llamado del técnico Celso “Chito” Ayala para debutar en la élite del fútbol paraguayo.

“Espero que el ‘Chito’ (DT) vea algo bueno en mí, y apueste su confianza en mí para darme unos minutos. Pienso que cuando llegue ese momento voy a poder cerrar una etapa en mi vida, podré sacarme esa espina y estaré en paz conmigo mismo. Seguramente, si salen bien las cosas seguiré jugando al fútbol y si no, a tatuar de nuevo”, declaró.

¿Cómo nace el afán de tatuar? así respondió…

“Siempre pensé que el tatuaje y el fútbol iban prácticamente de la mano. Varios jugadores están llenos de tatuajes e intentan plasmar para siempre sus historias en su propio cuerpo. En realidad, este talento lo descubrió Orlando Gallardo, mi excompañero en las formativas del Olimpia, con quien ahora volví a reencontrarme en River Plate”, rememoró.

El “Pitito” cuenta que su compí Gallardo tenía contactos con tatuadores y que le sorprendió la capacidad que también tenía él para dibujar. “Se puede vivir de esto”, agregó.

Lo que le dijo en vida su gran ídolo Maradona

Si mencionamos el talento de Rodríguez para tatuar, también le consultamos sobre el descubrimiento de su derroche de magia con el balón. “De pequeño, mi hermano me hacía entrenar llamando a nueve niños del barrio, comprándoles el famoso heladito de cien guaraníes. Él me decía que tenía que chulearle a todos, llegar al arco, y hacer un gol, como lo hacía Diego Maradona”, recordó Rodríguez.

“Vos estás loco pibe. Uy hiciste una como yo”, fueron las palabras de Maradona a Carlos Rodríguez luego de que le mostrará un video suyo. “Pitito” tuvo la oportunidad de conocerlo en su época de entrenador de Gimnasia y Esgrima de la Plata por medio de Víctor Ayala, alguien también muy apreciado por el Diego en su momento.