Una de las epidemias más dolorosas con la que carga este país son los imbéciles que habitan en su suelo. Pervertidos que creen que abusar de criaturas inocentes “está bien”, dejando a su paso secuelas que marcan la vida de un ser humano. Y no se está hablando de docenas ni de centenas de personas así, sino de miles de paraguayos que violan y hasta embarazan a niñas inocentes.

La directora de Atención a Víctimas del Ministerio Público, Karina Pérez, comentó que los últimos cinco años recibieron un total de 21.000 casos de víctimas de abuso, en su mayoría de índole sexual, de las cuáles al menos el 42 % son de menores de edad. Y estos números pertenecen solamente a los casos que fueron denunciados, ya que muchas veces en el interior del país hay menores que son abusadas sin que ello salga a luz.

Una cifra alarmante y a la vez triste dice que cada año se dan 500 a 600 casos de embarazos en niñas de tan solo 10 a 14 años. A pesar de lo obvio de tratarse de un abuso, mucho de estos casos no son investigados por la Fiscalía. Ahora saltó un nuevo caso de una menor de tan solo 12 años, quien fue mamá en un nosocomio de San Lorenzo.

La Dra. Gladys Mora, asesora técnica de la Dirección General de Programas de Salud, dijo que en los centros asistenciales no siempre se tiene una asesoría jurídica, motivo por el cual varios casos terminan no siendo denunciados ante el Ministerio Público.