Hace 8 meses que conocí a un hombre del que me enamoré profundamente. Es un joven trabajador, cariñoso, nunca me ha tratado mal, siempre se preocupa por mí, me pregunta cómo estoy, cosas así… Nos pusimos de novio hace 6 meses, en ese tiempo tuvimos relaciones y quedé embarazada, solo que perdí al bebé, él sufrió mucho cuando pasó todo eso. Lo superamos de a poco, hasta ahora estamos juntos y no pienso dejarlo porque lo amo muchísimo. El problema es que mi mamá no sabía nada del noviazgo, se dio cuenta recién cuando perdí el bebé y me prohibió volver a ver a mi novio, me hizo jurar que nunca más me acercaría a él porque no le cae bien. Y ahora tengo un miedo tremendo porque ella no sabe que seguimos juntos y no sé qué pasará si se llega a enterar. Tengo ese miedo porque mi mamá me amenaza con que lo va a denunciar si es que vuelve a acercarse. Tengo mucho temor de que me pillen mis padres, son muy duros conmigo, no quieren que tenga novio en ninguna parte y mucho menos con este chico, no les cae bien. No entiendo por qué no les agrada, si no tiene vicio alguno, trabaja bien, lo que más me gusta es que es sincero conmigo, y se preocupa por mí. Lo amo licenciada y no sé cómo decirle a mis padres que sigo andando a escondidas con él y ya no da gusto andar así, pero lo amo y sé que él también me ama a mí. Estoy dispuesta a luchar por el amor que siento por mi novio, pero no sé si decirles o dejar nomás así las cosas.

DALMA, DE ITAUGUÁ, 17 AÑOS.

RESPUESTA: veces los padres tienen la fantasía de que los hijos tienen que pedirles permiso para enamorarse, y  quizá recreando sus propias experiencias personales o dentro de su afán de evitarles el sufrimiento recurren a la sobreprotección sin tener en cuenta que eso puede hacer daño. Por más que desvíen el tema tendrás que ponerte en el lugar de ellos, e intentar hablarles de tus sentimientos. Primero mirá en tu interior y fijate si realmente vale la pena la lucha. Independientemente a la situación, los padres siempre quieren lo mejor para los hijos, aunque a veces tardan en darse cuenta que el tiempo pasa, y los pequeños crecen. Esa lucha debe asumirse con responsabilidad, ambos deben plantearse qué significa una relación, ver si ambos están preparados, es cuestión de llegar a un acuerdo y eso implica cuidarse, talvez esperar un poco más. Si hay amor nada puede separarlos.