ÑEMBY. Los vecinos de la excantera del cerro Ñemby desde hace un tiempo ya no escuchan ruidos para derrumbar piedras, pero ahora atraviesan un nuevo inconveniente que es el estado de abandono en el que se encuentra el predio.

Yuyales y quien sabe qué más bichos invadieron el predio, ya que la propiedad cuenta con más de 10 hectáreas utilizada por algunos vecinos para que las vacas puedan pastar sin problemas y, por otros, como sitio de “recreación acuática”.

Hace como 10 meses que en el lugar se junta agua de lluvia en los cráteres formando una laguna de color verde esmeralda hasta donde siempre va un grupo de jóvenes y niños para bañarse en los días de mucho calor.

Mientras la preocupación de los vecinos aumenta, la Municipalidad de Ñemby presentó ante la Corte Suprema de Justicia una acción solicitando la certeza constitucional para que el municipio pueda tener el poder de acceder al cerro Ñemby y realizar reformas.