• MIEDO. Ella le pide dinero porque no trabaja, su mayor preocupación más que la diferencia de edad es enamorarse y terminar engañado

Estoy divorciado, tengo 50 años y me persigue una chica muy linda, pero tiene 20 años… Claro que es por la plata, pero le tengo en la cabeza, quisiera tener sexo con ella.

No la puedo sacar de mi mente, me mandó varias fotos, me dijo que me espera para salir, pero me pidió 500 mil guaraníes prestados.

Ahora borré todas sus fotos y la bloqueé, estoy bien económicamente y sé que ella me comenzó a perseguir cuando supo eso, me dijo que me enamoraría de ella. Ya le dije que con mi edad bien puedo ser su padre, sé que muchos hombres se pondrían felices, pero yo siento que si salgo con ella y me gusta, seré un gran cornudo.

Me pide dinero porque no trabaja y quiere vestirse bien para mí, supuestamente; son de esas chicas que buscan hombres grandes para no trabajar o porque no hay trabajo.

Con las jovencitas hacemos lo que queremos, ya que dependen de nosotros; en cambio, con las mayores no, porque ellas son independientes. También estoy saliendo con una profesional y tiene su carácter, pero nos llevamos bien, y la chica, como te dije en términos bien paraguayos “me calienta” por ser más joven, puede cumplir mis deseos, cosa que con mi pareja no pasa. Solo pasa cuando ella quiere y justo apareció esta jovencita.

En principio venía a mi casa, me consentía mucho, me di cuenta que me comenzó a gustar, pero me dije a mí mismo ¿qué gano con una chica de 20 años? Yo quiero a alguien que pueda estar conmigo en las buenas y en las malas, qué puedo esperar de una que al salir dos veces ya me pide 500 mil guaraníes, después qué me pedirá?

DIONISIO, DE NUEVA GERMANIA, 50 AÑOS

RESPUESTA:  Para el amor no existe edad, las personas son las que ponen los límites, generalmente la sociedad es la que no ve con buenos ojos o se fija demasiado en la diferencia. Socialmente suele ser más aceptado que el hombre sea mayor que la mujer, pero en ambos casos siempre hay prejuicios como el que “solo es por la plata”.

Si dejáramos de lado los preconceptos, quizás empezaríamos a aceptar a cualquier pareja, sin importar la edad, la raza, la religión o el estatus social de sus integrantes. Pero la realidad es que hay muchas personas que por vergüenza al “qué dirán” mantienen su relación de manera clandestina y si deciden comunicarlo a la familia o amigos soportan todo tipo de presiones de ambos lados. Es natural que surjan miedos, inseguridades y celos, tener una novia mucho menor puede traer como consecuencias discusiones, escenas de malos entendidos. El éxito depende de la fortaleza de la pareja, el vínculo que exista o deseen consolidar y lo que cada uno espera de la relación. Tendrías que poner en una balanza imaginaria qué es lo que estás buscando en una pareja, si esta persona con la que estás saliendo de tu edad, que no te satisface en la intimidad o la chica que te roba el sueño pero que te pide dinero a cambio. Hacé tu elección con convicción, pero asegurate de que esa decisión te haga feliz.