GUSTAVO GALEANO. Corresponsal

CIUDAD DEL ESTE. Si no es todos los días, el tiempo máximo que se da entre uno y otro hecho de violencia contra una mujer no pasa de las 48 horas. Es el panorama actual y las estadísticas que mantienen jurujái, principalmente a los esteños, donde últimamente los hechos contra las yiyis se han sumado y agravado considerablemente.

En la noche del pasado martes, un día después que Crónica se hiciera eco sobre un nuevo caso de feminicidio e infanticidio que dejó con el Jesús en la boca al país, se dio un episodio similar, aunque esta vez no hubo finados. El hecho se registró dentro del aula de una conocida Universidad privé.

Ella, paraguaya de 21, y él, un rapai, Juliano de Carvalho Scherner (22), estaban rindiendo un examen en plena clase de la Universidad San Carlos, lugar donde cursan la carrera de ingeniería agronómica.

De pronto, y de la manera más sorprendente para los demás compañeros, el hombre se abalanzó sobre su pareja propinándole una fuerte patada en la cabeza sin llevar en cuenta que la persona que le había jurado amor eterno llevaba en su vientre a su hijo de apenas seis meses de gestación.

Un compañero, tras intentar intervenir, ocasionó mayor ira en el joven, quien no pensó dos veces en clavarle un bolígrafo muy cerca del ojo en reclamo a su intervención.

PRIMER CASO

El primer caso involucró a José Ramón Resquín Caballero (34), quien a golpes acabó con la vida de su retoño quien todavía estaba en el vientre de su lapa, Blanca González.

IMPUTADO

La fiscal Denise Duarte imputó por hecho punible contra la vida y violencia familiar a José Resquín. Además solicitó su prisión preventiva.