Como si no bastara con tres gobernadores “al frente”, con un cuarto que aplicando la ley del “ñembotavy” pescó también por quedarse con la silla y con un sinfín de situaciones fuera de foco, todo dentro de lo que fue la primera temporada de la “novela” gua’i más escandalosa de los últimos tiempos, ahora ¡se viene la segunda parte!

En breve, seguramente, se volverán a escuchar los gritos de la cuerona Marly Figueredo defendiendo el “puchero” de su marido, Rodolfo Friedmann, a quien una vez más le metieron serrucho en su silla de gobernador “teete” del departamento de Guairá.

En la víspera, la fiscala Irene Álvarez he’i que para el Ministerio Público la firma que está en la carta de renuncia que llegó con el “mensajero desconocido” es más verdadera que la muerte, por lo que la investigación empieza a tomar un nuevo rumbo.

De confirmarse la situación apuntada por Álvarez, podría tomarse como cierta la renuncia de Friedmann y desencadenar jeyma un guyryry de aquellos. Sin embargo, el marido de Marly he’i que jamás firmó ninguna renuncia, y que sigue firme al pie del cañón en su puesto. “Nos acabamos de enterar nosotros de esto. No nos extraña, sabemos cómo se maneja el Ministerio Público” he’i Friedmann a la 970AM.

Pide desestimación

Con el fallo de los peritos, la fiscala pide declarar so’o la acción de producción de documentos no auténticos presentada por Friedmann.

Arduo trabajo

Los peritos que investigaron si la firma era o no auténtica aseguraron que analizaron más de 90 documentos de la Gobernación.

La Junta aceptó

Cuando apareció el documento en cuestión, con la supuesta renuncia, la Junta Departamental aceptó la misma y nombró a otro.

Fueron varios

Primero, “tapó” la vacancia Óscar Chávez. Luego repusieron a Friedmann, lo volvieron a quitar y asumió Rodolfo Pereira.