• AMA DE CASA. La cuerona vive hoy su vida en los Estados Unidos, cuenta que es ama de casa y que ya le aprietan para ser mamá

PREFIERE VARONES. Hace ya casi un año que escuchábamos hablar de Gaby del Campo, la cuerona hondureña que tiempo atrás fuera una especie de reina de las polémicas en la farándula nacional.

Hoy, Gaby vive su vida a lo grande en Tulsa, estado de Oklahoma, Estados Unidos, con su marido muchos años mayor y su rol principal es el de ama de casa. Al menos eso es lo que comentó la todavía modelo, en conversación con Crónica, además de tirar que el “maridito” ya le empieza a pechear herederos.

– Gaby, ¿cómo te trata la vida en los Estados Unidos?

– Superbién. Vivo en Tulsa, acá en Estados Unidos, pero voy y vengo de Honduras a visitar a mis parientes. Estoy un poco permiso’i, por eso no puedo ir a Paraguay. Ando muy de ama de casa.

– ¿Hacés todos los quehaceres de una ama de casa?

– Realmente no me quiero involucrar mucho en los quehaceres de la casa, normalmente le digo a él (su marido) qué hacer (risas). A veces si me dan ganas de tomar en serio mi papel y voy y pongo la ropa en la lavadora.

– ¿Estás siempre con el señor mucho mayor que vos?

– Sí. Me siento re-joven con él, siempre lo dije, pero es el amor de mi vida. Eso sí, sigo enamorada de Paraguay.

– ¿Aún no te habla de tener hijos?

– Últimamente me viene hablando mucho de eso, me pide tener hijitos. Yo le digo que algún día me gustaría, que ser madre conlleva mucha responsabilidad.

– ¿Te gustaría tener nena o varón?

– Quiero varones, lindos varones, y quiero que uno de ellos sea paraguayo. Me gustaría tener un hijo paraguayo, que sea bien letradito.

– ¿Pero tu marido todavía tiene “balas”?

– Con su edad yo creo que es muy complicado, pero según él me asegura, su situación se puede mejorar si se realiza una operación. Pero eso será cuando yo esté lista y decida tener bebés.

– ¿Pero el paraguayo sería suyo o de un macho guaraní?

– Sería bueno que pudiera traerme el esperma de un arriero paraguayo bien macho. Es cuestión de convencer a mi marido. Te cuento que lo único que me traje de Paraguay son mis dos perritos, hermosos ellos.

– ¿Cómo te imaginás siendo madre?

– Me imagino como una Kim Kardashian con varios mitã’i, otra panzota de embarazada y minivestidos. Ojalá me nazca un jugador, quién sabe, puede que el paraguayito termine siendo el futbolista.