ENCARNACIÓN. En medio de la fría mañana, un héroe desconocido se encargó de dar alegría y ser ejemplo de honestidad y una valentía digna de mencionar.

Un joven curepa que venía de paseo para nuestro país en un ómnibus internacional dio la nota del día. Estaba disfrutando de la “Perla del Sur”, acompañado de su pareja. Dentro del bus fueron testigos de un hecho ilícito donde la víctima era un hombre de bastante edad.

El abuelito ni se dio cuenta de que dos carteristas lo habían desplumado en seco, pero el curepa se percató y no les sacó la vista a los malevos. Cuando llegaron en una esquina, los malandros se bajaron del vehículo y se fueron caminando como si nada.

El justiciero oñemombo detrás de ellos y les persiguió, los alcanzó a tres cuadras de donde se bajaron los cacos y les exigió que devuelvan la billetera ajena amenazándolos con una denuncia. Como para que no le caiga la Poli encima, los delincuentes le devolvieron la cartera del abuelo intacta, con todos los billetes adentro.

“Yo le vi cuando el sujeto se bajó del colectivo después de robarle a un señor bastante mayor ya. Sin pensar dos veces me bajé y le perseguí al tipo, le alcancé luego de varias cuadras y le reclamé lo que hizo” he’i el ejemplar ciudadano, sin dar su nombre al canal “+E”.

“Nos discutimos un rato y después me devolvió la billetera ajena, que le devolví al señor, que ni cuenta se había dado del hecho”, tiró finalmente.