NINO SILGUERO. CORRESPONSALÍA

VILLARRICA. La sesión ordinaria de la Junta Departamental del Guairá otra vez fue escenario de combate ayer. La misma se inició con incidentes por el pedido del colorado Patrocinio Brítez, quien pidió al presidente de la Junta, Rodolfo Pereira, para que se le ubique al concejal Óscar Chávez en el banquillo de los visitantes (Chávez está litigando en carácter de gobernador sustituto). Ahí oiko la sarambi por lo que Pereira levantó la reunión.

El tema es que quedaron siete concejales que decidieron continuar, con la presidencia del liberal Aldo Leiva. Rápidamente resolvieron rechazar el acta de la sesión del 24 de mayo que había repuesto a Rodolfo Friedmann como gobernador, entre otros puntos, y revalidar las actas en las que se habían aceptado su supuesta renuncia, además de convocar a una sesión extraordinaria para las 10:30.

Pereira y 5 concejales volvieron para la extraordinaria y cumplido el tiempo de tolerancia levantó la sesión por falta de cuórum. En eso volvieron a aparecer los opositores y se iniciaron nuevas escaramuzas. Todo quedó en veremos.