ÑEMBY. Una quema intencional de basuras acumuladas al costado de un gran predio perteneciente a la Conferencia Episcopal, que se encuentra en el barrio San Miguel, causó un revuelo de la gran siete que hizo rezar al rollo.

Algunos vecinos en horas de la noche utilizan el sitio como un minivertedero clandestino, donde tiran desde residuos domiciliarios y restos de árboles que fueron podados hasta cubiertas.

A eso se le sumó la inconsciencia de una persona quien en plena mediamañana del domingo no encontró mejor idea que meterle fuego a todo lo que había. El fuerte viento y la gran cantidad de materiales inflamables que se encontraban en el sitio fueron suficientes para que corra por todo el predio que tiene una amplia extensión.

Con las últimas heladas el pastizal de la zona estaba seco, las llamas rápidamente se extendieron poniendo en riesgo a varias de las casas, incluyendo los tensores y la torre de una radio AM que se encuentra en el sitio.

Los bomberos de la 7ª compañía de San Lorenzo trabajaron arduamente para controlar las llamas.