Después del calor de verano en pleno invierno que se vivió en el país en la última semana, la lluvia llegó de forma torrencial, y entre la noche del sábado y parte de la madrugada de ayer se comenzaron a sufrir las consecuencias. Parecía que ¡opáta la mundo!

Derrumbes, árboles caídos, varios postes del tendido eléctrico destrozados, sarambi por todos lados fue el saldo de un temporal que afectó a varias localidades. La que más sufrió fue la zona de la colonia Neuland, ubicada en el distrito de Mariscal Estigarribia, departamento de Boquerón, donde el fuerte viento hizo “volar” literalmente varios techos de viviendas.

Según el reporte de las autoridades correspondientes, unas 97 casas quedaron chalái tras las fuertes ráfagas de viento y al menos 12 personas quedaron con naná producto de las chapas que volaron. Según la Policía, en horas de la noche del sábado se produjo un minitornado que duró al menos unos 20 minutos lo que causó los daños materiales y producto de ello hubo personas heridas.

Según datos proveídos por los intervinientes unas 53 casas de la comunidad indígena periurbana de Neuland, Cayin o Clim, 29 casas y edificios en el barrio Las Mercedes de Neuland, y otras 15 viviendas y edificios de pobladores menó o de la asociación y cooperativa Neuland fueron las víctimas de la tormenta.

Secretaría de Emergencia Nacional envió ayuda

La Secretaría de Emergencia Nacional (SEN) envió a la zona de Neuland frazadas, colchones, mil chapas de zinc y 100 carpas para las familias afectadas. En otros departamentos como Guairá, Caaguazú, Caazapá, Itapúa, Misiones, Paraguarí y Alto Paraná heta oky avei. Incluso en la zona de Villa Franca, departamento de Ñeembucú, cayeron granizos del tamaño de una pelota y causó algunos que otros daños. ¡Desastre!